Trabajadores de la zona coinciden en que el estado de la boca de tormenta constituye un peligro para todo aquel que camine por allí. Explicaron también que se dio aviso a la Municipalidad sobre la situación pero no hay respuesta.
En la intersección de Avenida San Martín y calle Alberdi, en la esquina del edificio de la Armada Argentina, los márgenes de una boca de tormenta se desmoronan día a día.
“El lunes pasado se desmoronó otro pedazo; si te caes ahí vas a aparecer en Güemes”, sostuvo irónicamente un trabajador de volante que se desempeña en la zona.
Cabe destacar que los trozos de material que han cedido conformaban el cordón de la vereda, por lo que en un descuido – o el solo caminar de noche por allí – podría producir un accidente.
Otro trabajador de la zona aseguró, en tanto, que la Municipalidad fue advertida sobre la situación pero que hasta el momento no hay respuestas. Mientras, los trozos de concreto se desprenden día a día y hasta restos de la estructura metálica han quedado expuestos.
Con información de Aries
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