Policiales

Justicia El padre de una de las turistas francesas asesinadas en Salta pidió la reapertura de la investigación

Fue presentado en la noche del viernes en París el estudio académico de Cassandre Bouvier y en esa oportunidad, a diez años del doble homicidio, se criticó la actuación de la Justicia en un caso de impacto internacional

Se realizó ayer, en París, un acto para la presentación póstuma del estudio académico de Cassandre Bouvier, la joven investigadora francesa que fue brutalmente asesinada junto a su amiga Houria Moumni en Salta, en julio del 2011. Este caso no solo causó una gran conmoción internacional, sino que también fue uno de los mortales episodios que impulsó la incorporación de la figura de femicidio en el Código Penal argentino. A 10 años del doble crimen, los familiares de las víctimas aún reclaman Justicia y aseguran que uno de los condenados de la causa es inocente.

Jean Michel Bouvier llevaba más de una década solicitando que la investigación de su hija Cassandre fuera publicada y retomada por otros académicos. El estudio titulado “La Nicaragua de los Sandinistas – Un espejo de la transición democrática española” finalmente fue presentado anoche durante un acto en el campus Condorcet, de la Universidad Sorbonne Nouvelle de París. Las víctimas eran estudiantes del Instituto de Estudios Superiores de América Latina (Iheal) y, anteriormente, habían sido recordadas por autoridades de esa institución educativa como “dos jóvenes brillantes que dedicaban su talento y su energía en estudiar América Latina, donde fueron brutalmente asesinadas”.

De la exposición del acto participaron Capucine Boidin, directora de Iheal, y Najet Belkacem, exministra de Educación francesa. El padre de Cassandre fue uno de los principales oradores y expresó el profundo dolor que vive desde hace más de una década: “Diez años de espera, diez años de ahogo sin que ni siquiera se hayan pronunciado las palabras legítimas para decir lo que te pasó”. Bouvier declaró sentir una “indignación total” contra el Poder Judicial argentino, ya que sus representantes “no fueron capaces de hacer justicia”.

Luego del juicio por el abuso sexual y homicidio de Cassandre, de 29 años en el momento del crimen, y Houria, de 21, que se realizó en Salta en 2014, Jean Michel Bouvier se convenció de la inocencia de dos de los tres acusados de la causa: Daniel Vilte y Clemente Vera, contra quienes, a su criterio, no existía evidencia científica y categórica que los vinculase con el doble crimen. Ambos llegaron al juicio acusados por el tercer imputado, Gustavo Lasi, quien confesó haber abusado sexualmente de las víctimas, pero culpó a Vilte y Vera por los homicidios. Se trata de tres hombres muy humildes que vivían cerca de la Quebrada de San Lorenzo, lugar donde se hallaron los cuerpos de las jóvenes.

La justicia salteña resolvió, en 2014, absolver a Vilte y Vera por el beneficio de la duda y condenar a Lasi a prisión perpetua. Un año y medio después, el Tribunal de Impugnación condenó a Vera a prisión perpetua sin sumar nuevas pruebas ni rehacer el juicio. Anoche, en París, Bouvier se refirió a esa condena y la catalogó como una “felonía” que “tuvo como objetivo señalar, a cualquier precio, un segundo culpable como ofrenda expiatoria, con la única finalidad de disimular el malestar generado por los errores de la incompetencia del juez de instrucción de l

Bouvier, ante un público atento a sus palabras, pidió que Vilte fuera indemnizado por el Estado argentino “por los años de prisión indebidamente soportados”. Con respecto a Vera, una vez más pidió su liberación e indemnización. “A pesar de todo esto, conservo la esperanza de que la Corte Suprema de Justicia de la Nación argentina disipe mi enfado, reparando todos los perjuicios sufridos y autorizando la reanudación de las investigaciones para conocer toda la verdad sobre la violación y el asesinato de Cassandre y Houria, independientemente del estatus social de sus autores y cómplices”, expresó.

Además, el padre de Cassandre advirtió que, si la Justicia argentina no dispone la liberación de Vera y la realización de un nuevo juicio para saber qué sucedió con su hija y su amiga, apelará a un organismo internacional: “Mi enfado se expresará ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos”. Los familiares de las víctimas podrán acudir a este órgano consultivo una vez que se agoten todas las instancias en Argentina ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación. El máximo tribunal tiene a su cargo un recurso de revisión de la condena de Vera desde el año 2017.

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