Después de que este domingo trascendiera que mañana la empresa de bandera YPF iba a subir un 5% el precio de los combustibles, desde el Gobierno informaron que el presidente Alberto Fernández decidió que «no es el momento de hacerlo».
«Lo decidió el presidente directamente. El aumento que se iba a aplicar desde hoy a las 00 no se va a efectuar. La decisión de Alberto es que no es el momento de hacerlo ahora», afirmaron fuentes del Gobierno.
Según explicaron la suba estaba prevista desde antes de que Fernández asumiera y el presidente de YPF, Guillermo Nielsen, iba a continuar con esta medida. «Estaba decidido para esta época por el directorio anterior, pero Alberto pidió que se detenga. Él toma la decisión por el impacto que puede tener el aumento. Nielsen es presidente de YPF, pero es una persona de nuestro espacio político».
En tanto fuentes internas de la empresa, dijeron que Nielsen fue quién confirmó el aumento a varios periodistas, pero cuando personas que no estaban enteradas dentro de la firma empezaron a chequearlo, nadie del Gobierno confirmaba ninguna versión hasta que el ministro de Producción, Matías Kulfas, dijo que no estaba validado y se dio marcha atrás.
«Parecía que aumentaban las naftas y a último momento alguien llamó a alguien para que el aumento no ocurra. Nunca se generaron las condiciones políticas de un aumento y se salió a anunciar prematuramente que iban aumentar las naftas cuando no tenían el ok del Ejecutivo», agregaron.
Si bien Axion y Shell todavía no habían confirmado alzas, se suponía que ambas empresas iban a seguir lo que estableciera YPF no solo porque desde el miércoles aumentan los impuestos sino porque el precio de los combustibles está retrasado.
Hace una semana dueños de estaciones de servicio habían advertido que los valores estaban atrasados, como mínimo, un 8%. Y, con la actualización del impuesto a los combustibles líquidos (ICL) por la inflación pasada, la diferencia ascendería a un 15%.
En 2019, el valor de la nafta aumentó en nueve ocasiones y sumó en total un 41%. Esto es menor al 55% estimado de inflación para el año y por debajo del 60% que se incrementó el tipo de cambio oficial.
Las empresas también consideraban que los precios estaban atrasados, pero esperaban la definición de YPF que es la realmente la que decide los aumentos, ya que tiene alrededor del 58% de participación de mercado.
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