El río Dorado se desbordó y alcanzó a un abuelo que hachaba leña. El septuagenario aguantó arriba de un árbol. La policía lo halló.
Un increíble rescate de persona logró el personal de Bomberos y policías de Apolinario Saravia, anoticiados del desborde del río Dorado y la desaparición de un vecino arrastrado por las aguas.
Guillermo Sarmiento, jefe de Bomberos de Apolinario Saravia, junto a policías y vecinos salieron en busca del septuagenario en medio del monte anegado por la crecida.
A partir de las 11.30 se dio conocimiento a Bomberos de que una persona mayor, de 69 años, de nombre Gabriel Romero, estaba perdida.
Había ingresado al monte a buscar leña la tarde del último diluvio. En límites del río fue sorprendido y arrastrado por la crecida. A las 12 de ayer comenzó la intensa búsqueda en conjunto entre bomberos, policías, vecinos y baquianos.
Fuentes de la zona explicaron que las aguas desbordadas llegan a tapar los algarrobos y los vinalares y que las aguas del río Dorado se caracterizan por ser extremadamente pesadas, es decir barrosas cuando se desborda. Esto imposibilitaba llegar cerca de lo que es el canal principal y la búsqueda fue peatonalmente por las sendas que permitían acercarse a los lugares donde podía hallarse el hombre, que aunque es una persona mayor, conocía los peligros del río desbordado.
Es así que después de una desgastante búsqueda a las 16.30 un grupo de bomberos logró encontrar a la persona, la que se había asido a un árbol en el que esperó la bajante para finalmente quedarse al pie del mismo.
El abuelo se encontraba conmovido por lo vivido pero agradecido de la búsqueda inmediata, ya que se encontraba exhausto de luchar con las aguas del río que lo llevó kilómetros por encima del monte.
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