La cuestionada obra de la Municipalidad de Salta ya genera indignación a los salteños. Caos por la demora y el corte eterno del tránsito en pleno centro.
Por quinta vez levantan adoquines de la cuestionada obra del Corredor de la Fe, lo que demuestra una total falta de controles en la calidad de las obras que encara la gestión de Gustavo Sáenz.
El caos que se vive en el centro de la ciudad tiene como protagonista, entre otros motivos, a la calle Caseros entre 20 de Febrero y 25 de Mayo a raíz de un nuevo corte por la polémica obra del Corredor de la Fe.
Es la quinta vez que se levantan los adoquines en una zona ya habilitada, sin embargo, y a pesar de los miles de testigos indignados por la situación, desde la Municipalidad negaron esta información. Ahora, desde la empresa adjudicataria explicaron que trabajaban en la instalación de un caño de agua.
Un nuevo capítulo para una novela que se renueva con el paso de cada semana. En plena hora pico, y sin ningún tipo de señalización que los asistiera, los peatones tuvieron que abrirse paso entre maquinarias, escombros y cables.
Los trabajos se realizaron sobre calle Caseros, desde la 25, hasta la peatonal Florida. Aunque la esquina más perjudicada fue la intersección de caseros y 20 de febrero, por tratarse de una calle con gran circulación, según informó El Tribuno.
El tramo en el que se levantaron los adoquines ya estaba habilitado, por lo que – además de los primeros hundimientos que mostró apenas autorizada la circulación-, no hizo más que sumar críticas a una obra seriamente cuestionada por la falta de controles y por la calidad de las obras que encara el Intendente Gustavo Sáenz.
La obra lleva una enorme demora y esto hace que los salteños deban sufrir un verdadero caos de tránsito desde hace meses.
No les va mejor a los comerciantes de las calles afectadas ya que la interrupción de las mismas y la prolongada demora de las obras afectaron seriamente sus ventas, ocasionándoles enormes pérdidas y dificultades de las que nadie se hace responsable.
Lo que se le criticó a esta obra a lo largo de su ejecución, fue justamente eso, las falencias que evidenció durante su realización que comenzó el año pasado. A través de diferentes hundimientos, que quedaron a la vista de cualquier transeúnte, algunos tramos tuvieron que ser reparados en diferentes oportunidades. La Caseros fue una de las primeras en evidenciarlos, luego se le sumó lo que sería el trayecto más polémico de la obra municipal financiada con fondos nacionales: la calle Juramento entre Caseros y España, allí se realizaron hasta ahora más de cuatro reparaciones a causa de los hundimientos.
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Una Vergüenza y nadie se hace responsable, más de 3 veces levantando los adoquines y lo peor que la gente está resignada como si lo que pasa fuera normal