A través de un relevamiento realizado por el sector de Economías Regionales de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) se observó la alta incidencia de los impuestos en los valores de comercialización de la yerba mate. El mes pasado, en Capital Federal el precio promedio del paquete de un kilo de yerba alcanzó los $ 340,70, del cual el productor significó el 22,4%; el sapecado, secadero y canchado el 7,6%; la molienda y envasado el 11,1%, el mayorista el 10,7%, el minorista el 8,9%, y los impuestos el 39,3%.
Del precio que pagó el consumidor en la góndola de un supermercado, el 17,8% corresponde a ganancias netas y el 42.8% a costos. En el precio final de la yerba mate, el 78,08% corresponden a los tributos nacionales y el 21,92% son provinciales. En ese sentido, el informe de CAME detalló que hay una presencia del 53,58% del IVA, el 24,50% del Impuesto a las Ganancias y el 21,92% de Ingresos Brutos.
“Queda claro que los productores de alimentos no somos formadores de precios. La atención no debiera centrarse en nosotros, sino en repensar el esquema impositivo, lo que beneficiará tanto al consumidor como al empresario agroalimentario”, comentó el referente del área de Economías Regionales de CAME, Eduardo Rodríguez
El relevamiento mensual de CAME de toda la cadena de valor de la yerba mate, se realizó desde la ciudad misionera de Oberá, hasta su comercialización en 15 puntos de venta en Capital Federal, considerando grandes cadenas (hipermercados) y comercios de cercanía (almacenes).
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