A una semana del ataque confirmaron la enfermedad del animal y advierten sobre la propagación en la zona.
El pasado 21 de abril, una nena de 10 años de Orán fue asistida por la mordedura de un perro. Hasta ahí no parecía un caso tan llamativo, pero la sorpresa llegó una semana después, al confirmarse que el animal no presentaba la vacuna antirrábica.
La menor fue atacada cuando se encontraba en la ciudad de Bermejo, en puerto de chalanas, frontera que limita con Bolivia. Una semana después, el perro murió y los veterinarios confirmaron que tenía rabia.
A raíz de esto, se conoció que al menos otras siete personas manifestaron que fueron mordidas por el mismo animal y que también habrían contraído la enfermedad.
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