En su postulación como senador se manifestó en contra de la legalización luciendo un pañuelo celeste en su muñeca, pero ahora, en un extraño galimatías sostiene que tiene convicciones pero que “también está lo que uno representa”.
Presionado por todos lados, hoy forma parte de los senadores que no se sabe cómo votarán y se especula que podría cambiar su voto.
El salteño Sergio “Oso” Leavy dijo que está definiendo su posición. “Tengo convicciones personales” aseguró, pero “también está lo que uno representa”.
Estas incoherentes definiciones lo dejan mal parado, porque está sobreentendido que si en campaña para ser senador nacional dijo que votaría en contra de la legalización de aborto, al ser elegido, eso es lo que representa, lo votaron para lo que prometió.
En la votación del año 2018 cuando era diputado nacional pareció mostrar algo de coherencia entre lo que prometió que haría e hizo. Pero ahora, en esta confusión de definiciones, se muestra como un hombre sin convicciones ni palabra para con el electorado que le dio la banca de senador nacional.
Sergio “Oso” Leavy mantuvo un encuentro con el presidente Alberto Fernández la semana pasada y se habló de que fue fuertemente presionado para dejar de lado sus supuestas convicciones.
“Hay militantes que piden que vote de una forma y otros de otra. Me hubiese gustado un plebiscito, que todos los salteños voten y que en base a eso se haga ley. Pero se gobierna a través de los representantes. Está mi pensamiento, lo que uno quiere, en lo que se formó y está lo que uno representa y eso nos tiene debatiendo, hablando, seguimos viendo”, aseguró Leavy en diálogo con el canal Multivisión Federal.
Consultado sobre la posibilidad de que cambie entonces su voto, respondió: “No es una decisión tomada. Hay muchos intereses de muchos argentinos que piden de diferentes formas, mucha gente apoya la misma postura y otros piden que sea ley como ya lo es en Italia, España y muchos otros lugares del mundo. Por convicción uno ya tiene una decisión pero representa a más gente y hay que seguir debatiendo, escuchado”.
En ese sentido reconoció que a “muchísimos legisladores les gustaría votar en contra pero que se apruebe la ley”.
Sobre la reunión con el Presidente, detalló: “Él sabe lo que yo pienso y yo sé lo que él piensa. Le pedí para que haya más presencia del Estado no solo en dinero, con acciones que se reflejen”, aseguró. “Voy a tomarme estos días que nos dan, tenemos tiempo todavía para seguir trabajando y escuchando voces”, concluyó.
La semana pasada Leavy también mantuvo un encuentro con el ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat, Jorge Ferraresi, quien es además vicepresidente del Instituto Patria, de Cristina Kirchner.
En la pelea empatada por los votos y las dudas que surgen por los pedidos de cambios, un posible giro de postura de Leavy sería clave para lograr el avance del proyecto.
Pero el sector «celeste» también lo está presionando para que se mantenga en contra de la legalización del aborto, que ya fue aprobada en Diputados. En Salta pusieron pasacalles que rezan: «Senador vote por las 2 vidas como en 2018».
También afiches con la cara de Leavy pidiéndole que mantenga su voto en contra: “Siga defendiendo la vida. El pueblo lo acompaña”.
La diputada provincial de Santa Fe y militante pro vida, Amalia Granata, ya lo cruzó por Twitter: «¿De qué depende su duda? ¿De quien le ordene o quien le dé mas? Por favor ocupe con dignidad y honor el puesto que le dio el pueblo», escribió.
En el sector «celeste» del oficialismo en el Senado, sin embargo, creen que la convicción de Leavy en contra de la legalización del aborto es más fuerte y que por más que el Gobierno busque hacerlo cambiar de opinión, no lo van a lograr. Confían en que mantendrá su rechazo y todavía lo cuentan entre los 16 del Frente de Todos «seguros» en contra.
Días atrás, ese grupo mantuvo una reunión por Zoom para darse ánimo y reafirmar la decisión de sostener la decisión, a pesar de que es el proyecto es una política y promesa de campaña del gobierno de Fernández.
El oficialismo ya logró cambiar una «celeste» a «verde». La rionegrina Silvina García Larraburu había votado en contra en 2018 pero este año firmó el dictamen a favor del proyecto y salió del chat de Whatsapp de los anti aborto.
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