Emergencia sociosanitariaSáenz aseguró que la desnutrición en el norte de Salta se esta revirtiendo por obras de agua potable y presencia del Gobierno

Fue en el marco de una firma de convenio con la ministra de Desarrollo Social de la Nación, Victoria Tolosa Paz.El gobernador Gustavo Sáenz encabezó esta mañana una firma de convenio junto a la ministra de Desarrollo Social de la Nación, Victoria Tolosa Paz. El objetivo es constituir un nuevo Banco de Herramientas y Materiales para la Emergencia Social.

En este marco, el mandatario reiteró su cuestionamiento por las “dos argentinas” que, según sostuvo, “tiene que ver con esas lógicas de los gobiernos nacionales de centralizar la ayuda social y las oportunidades para todos”. Se refirió así a “la Argentina llena de privilegios, en el centro del país, y la Argentina llena de necesidades e injusticias”.

Sin embargo, destacó el acompañamiento de la ministra Tolosa Paz, incluso antes de ser Ministra de Desarrollo Social, durante el inicio de su gestión, al declararse la emergencia sociosanitaria en el norte que, año a año, se fue prorrogando.

“Todos los días se nos moría un niño o niña por desnutrición y había que enfrentarlo”, sostuvo Sáenz para luego asegurar que la situación se está revirtiendo “con trabajo, con agua potable”. Se jactó luego de construir, en menos de tres años, un centro de recuperación nutricional.

“Nos tocó también la parte más difícil, la sequía, porque no se había previsto que la naturaleza podía golpearnos de tal manera”, continuó en referencia a una situación advertida ante el avance del calentamiento global, que tiene a los desmontes como un factor clave.

Según Sáenz, “muy poco importa si uno es de derecha, si uno es de izquierda, si es de centro, si es progresista, si es independiente”. “Cuando hay un niño que se muere, tenemos que estar todos juntos tratando de resolver esa situación”, dijo al tiempo que apuntó, entre otras cosas, a los tutores de niños muertos por desnutrición por negarse a recibir asistencia médica, casi desconociendo pautas culturales que, sin intérpretes bilingües, resulta muy difícil sortear. “Vamos bien y nos va a ir mejor”, finalizó.