El Frente de Todos quedó segundo y sólo accedió a un escaño. Es una de las provincias que le hace perder el quórum al oficialismo en la Cámara Alta.
Con el 98,75% de las mesas escrutadas, Juntos por el Cambio se impuso en Chubut en las elecciones legislativas 2021 con 48,34% de los votos. Segundo quedó el Frente de Todos, con el 42,11% de los sufragios.
Con esos resultados, la oposición se quedó con dos bancas del Senado y complicó al kirchnerismo, que actualmente contaba con tres bancas. La contundente victoria le quitó el quórum en la Cámara Alta a Cristina Kirchner.
Como nunca, Chubut fue un gran protagonista en estas elecciones. Desde 1983 en que se restauró la democracia nunca le habían prestado tanta atención debido a su escaso padrón. Pero esta vez fue distinto. Todos apuntaron a esta provincia patagónica que renovaba tres senadores y tres diputados nacionales.
Por esas cosas que tiene la política los tres senadores que hoy ocupan bancas responden al Frente de Todos. Nancy González y Juan Mario País son Kirchneristas puros. Pero a ellos se les sumó Alfredo Luenzo que llegó al senado de la mano del fallecido gobernador Mario Das Neves, acérrimo enemigo de los Kirchner.
Apenas Das Neves falleció, Luenzo se cruzó de vereda y fue a engrosar la lista de senadores del oficialismo nacional.
El resultado de las PASO de septiembre había favorecido claramente a Juntos por el Cambio. El espacio opositor obtuvo el 39,48% de los votos (fue con dos listas), mientras que el Frente de Todos cosechó 26,40%. Una diferencia amplia a favor de quien tuvo en Ignacio “Nacho” Torres, actualmente diputado nacional, como primera candidato a senador.
El Frente de Todos tropezó de entrada, con muchas dificultades y pujas internas para definir sus candidatos. El nombre cayó al final sobre Carlos Linares como primer candidato a senador y Florencia Papaiani en segundo lugar.
Quedaron postergados Nancy González, muy allegada a la vicepresidenta Cristina Kirchner, y Gastón Leúnda, un dirigente de Comodoro Rivadavia que es vicejefe de ministros de Alberto Fernández.
Leúnda había promocionado su precandidatura apoyado por varios intendentes. Pero a último momento se retiró de la pelea. El «dedo» de Cristina había determinado que Linares sea quien encabece la lista sin que tenga enfrente ninguna otra boleta.
Pese a su imagen un poco desgastada sobre todo por los problemas financieros que tuvo la provincia en los últimos dos años, el gobierno de Mariano Arcioni presentó batalla.
Fue su polémico ministro de Seguridad Federico Massoni quien encabezó la lista de candidatos a senadores. Y el ministro de Salud Fabián Puratich fue primero en la de diputados nacionales. Obtuvieron en las PASO un 15%, un número nada despreciable para un gobierno que tenía más errores que aciertos.
Las tres listas se convirtieron en las protagonistas excluyentes de la elección -también participó el Frente de Izquierda y el Pich (Partido Independiente de Chubut- que tuvo su máximo pico de atención en lo que sucediera con los senadores.
De las tres bancas en juego, dos son para el ganador y uno para quien obtenga el segundo lugar. La provincia, ubicada históricamente en la periferia de la política nacional, pasó a los primeros planos por su rol clave en la distribución de fuerzas dentro de la Cámara que preside Cristina Kirchner.
De hecho, dirigentes de primera línea de Juntos por el Cambio e importantes funcionarios del gobierno nacional, incluido Alberto Fernández, llegaron para hacer campaña.
Incendios forestales, ataque de los pseudos mapuches, problemas financieros, paros reiterados en la administración pública y pujas internas con vistas a 2023 pusieron su cuota de influencia en los resultados finales.
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