Esta vez ocurrió en el estadio de Juventud Unida. Dentro y fuera de una cancha, dos facciones se enfrentaron con suma violencia. Hubo golpes de todo tipo y también lluvia de piedras entre equipos rivales. La policía dice estar desbordada.
El domingo último hubo una tremenda batahola entre equipos e hinchadas pertenecientes a la Liga Rural de Fútbol de Rosario de Lerma. Ocurrió en los alrededores del Club Juventud Unida, en el centro de la ciudad. En el choque entre partidarios de los clubes Deportivo Islas Malvinas e Yrigoyen, se arrojaron piedras en medio de un caos total en el que participaron hombres y mujeres, una de ellas hasta dejó de lado el coche con su bebé para sumarse a la violencia.
Mientras la Policía brillaba por su ausencia, la situación terminó convirtiéndose en una batalla campal. «Estos actos de violencia se repiten casi todos los domingos y es alarmante. Hasta cuándo se permitirá esta situación. Las autoridades y la policía deben tomar cartas en el asunto», reclamó un vecino. La gente que vive a metros del lugar sufrió los daños colaterales que este tipo de hechos provocan, además del desorden y temor.
Por otro lado, Rodrigo Aranda, subjefe de la Unidad Regional 11 del Valle de Lerma, afirmó que la policía no da abasto debido a la gran cantidad de encuentros futbolísticos que se disputan los fines de semana en las diferentes ligas de la zona, por lo que no pudieron llegar a tiempo cuando se producían los incidentes.
«Nos vimos desbordados por la cantidad de eventos deportivos que tuvieron lugar simultáneamente. Llegamos con cierto retraso pero vamos a prestar más atención en el futuro. El fiscal ha intervenido en el asunto y se tomarán medidas disciplinarias contra los responsables», afirmó el funcionario policial.
Los efectivos llegaron al despeje de los incidentes cuando se habían calmado las aguas, y luego custodiaron a una de las hinchadas hasta su barrio con el objetivo de que no se vuelvan a enfrentar. Pero en otro punto de la ciudad, en el partido entre Carabajal y Provipo también hubo desmanes. Fue suspendido debido a que las hinchadas se enfrentaron en pleno campo de juego.
Meses atrás, en otro partido de fútbol de la misma liga, hubo peleas que terminaron con heridos. En aquel momento se suspendieron los encuentros y los clubes involucrados fueron sancionados.
«Estamos por reunirnos con las autoridades locales y los de la Liga, no están dadas las condiciones para que este tipo de encuentros se disputen, es un peligro para los vecinos y la policía no puede cubrir tantos partidos de fútbol en esas condiciones. El resto de la gente necesita seguridad».
En el partido del Club Deportivo Islas Malvinas y el Club Yrigoyen hubo golpes, lanzamientos de piedras y amenazas a los vecinos por filmar el «tole tole». Pudo haber sucedido cualquier cosa en las afueras del club que cedió sus instalaciones para el partido.
Los vecinos han reclamado por estos incidentes y tienen temor de denunciarlos debido a amenazas por parte de miembros de estos grupos antagónicos. La Municipalidad de Rosario de Lerma advirtió a la Liga Rural que, de seguir ocurriendo estos hechos, suspenderán los eventos «deportivos».
«Vamos a entablar una mejora en las condiciones de llevar adelante estos partidos de fútbol. Por algunos violentos no se puede meter a todos en la misma bolsa. La Policía, la Municipalidad de Rosario de Lerma y la Liga Rural nos vamos a reunir. No pueden ocurrir más este tipo de hechos violentos», afirmó Juan Gutiérrez, secretario de Gobierno de la Municipalidad de Rosario de Lerma.
Con información de El Tribuno
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