Calles, plazas, avenidas, escuelas, hospitales y otros bienes públicos fueron bautizados con su nombre; cuando Cristina Kirchner inauguró el CCK en 2015 ya se registraba esta tendencia.
Desde la muerte del expresidente Néstor Kirchner en octubre de 2010, su nombre fue emplazado en más de 170 lugares del país. Calles, plazas, avenidas, escuelas, hospitales y otros bienes públicos fueron bautizados de esa manera, de modo tal que cuando Cristina Kirchner inauguró el CCK en 2015, ya se registraba una tendencia en ese sentido a nivel nacional.
La gran mayoría de los homenajes al expresidente se registró en ese período de cinco años, entre finales de 2010 y 2015, que coincidió con el segundo y último mandato de Cristina Kirchner al frente del gobierno nacional. Y tuvo lugar en las provincias y los municipios afines al kirchnerismo.
A través del vocero presidencial, Manuel Adorni, el Gobierno informó que el Centro Cultural Kirchner (CCK) cambiará de nombre. La decisión, que sobrevolaba en el oficialismo desde las primeras horas y va a contramano de lo que expresó su directora Valeria Ambrosio al asumir, no cuenta aún con la precisión de cuál será el nombre del centro cultural. De hecho, luego del anuncio, la cuenta de X de la Vocería Presidencial preguntó cómo debería llamarse.
Transcurrieron apenas un puñado de días desde su deceso -el 27 de octubre de 2010- cuando el Concejo Deliberante de Río Gallegos decidió modificar el nombre de la principal avenida de la capital de Santa Cruz. En febrero de 2011, Cristina Kirchner y su hija Florencia asistieron al acto por el cual un tramo de la Avenida Julio Argentino Roca pasaría a llamarse “Presidente Dr. Néstor C. Kirchner”.
Casi tres años después, la entonces presidenta inauguraba en San Salvador de Jujuy la quinta terminal de ómnibus con el nombre del exmandatario. Las otras cuatro estaban en Tucumán, Santiago del Estero, Mendoza y Córdoba.
La costumbre de inmortalizar a Kirchner en calles y otros bienes públicos estaba tan extendida entre provincias y municipios, que ese mismo año el periodista Leonardo Mindez creó el sitio “Ponele Néstor a todo”. Allí subía las fotos que desde todo el país le compartían otros compatriotas con monumentos, letreros o pasajes.
En la página se observa desde un salón de usos múltiples hasta una unidad móvil de la TV Pública, pasando por un complejo turístico o un centro de rehabilitación. Todas con un mismo y único nombre. Con toda la información recopilada, Mindez elaboró un mapa que se puede consultar hasta el día de hoy.
En total, a partir de las colaboraciones que le eran enviadas, geolocalizó, entre plazas, plazoletas, calles y pasajes, y muchas otra cosas alusiones a la figura de Kirchner, 179 puntos a lo largo y ancho de país. Se trata de una lista no exhaustiva. Allí, por caso, no figura el torneo clausura que consagró a Vélez Sarsfield campeón del futbol argentino en 2011 y que llevaba por nombre “Néstor Kirchner”.
En la ciudad porteña rige una ley que prohíbe llamar a un lugar público con el nombre de una persona antes de que se cumplan 10 años de su fallecimiento. El ahora exCCK recibió esa nomenclatura apenas un lustro después de la muerte de Kirchner en 2010, pero como el edificio es de propiedad nacional, el Gobierno hizo caso omiso a la normativa y avanzó con el nombramiento aduciendo que esa ley no contemplaba a la edificación del exCorreo Central.
En el mismo sentido de esta ley porteña corrió un intento del Gobierno de Cambiemos en 2016. El proyecto solo buscaba cambiarle el nombre el centro cultural inaugurado por la expresidenta un año antes, sino también la aprobación de una nueva ley nacional que estirara la restricción temporal a 20 años.
El proyecto de ley que circuló por aquel entonces añadía que las nuevas designaciones para los bienes y lugares públicos debían fundarse “en sólidas razones de naturaleza institucional, histórica o cultural” para los lugares que careciera de denominación. El proyecto, no obstante, nunca ganó volumen político y no fue tratado en los recintos del Congreso.
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