Claudio Segundo es juzgado por el crimen de su novia, Brisa Oriana Goytia, una adolescente de 15 años, estrangulada en diciembre de 2016, en barrio Juan Pablo Saravia.
Pasaron más de ocho meses desde aquel 6 de diciembre de 2016 cuando Brisa Oriana Goytia, una adolescente de 15 años, fue asesinada por su novio a quien ya había denunciado por hechos de violencia y tenía una prohibición de acercamiento, según publicó La Gaceta.
Aquel mediodía el barrio Juan Pablo Saravia, en la zona sur de la ciudad, se conmocionó. No solo por la tragedia de lamentar una muerte sino por los detalles que fue revelando la Justicia sobre el crimen.
Ese día, Claudio Víctor Segundo había invitado a su casa a su novia para compartir el almuerzo. Allí surgió una fuerte pelea entre la pareja. Según lo investigado por la Fiscalía, el joven llevó a la víctima hasta una habitación de la casa porque Brisa ya no quería seguir con Segundo.
Pero no estaban solos: en la casa de la zona sur de la ciudad estaba también Ana, la joven que por entonces tenía 13 años, observó todo y fue una testigo clave. La adolescente escuchó los gritos y luego los jadeos de Brisa cuando Claudio la estrangulaba con un cinto. Fue hasta el dormitorio y vio a su hermana atacar a la novia.
Ana corrió hasta la casa del vecino de enfrente y le avisó lo que sucedía. “Don Carlos llame al 911 que Claudio la está ahorcando a Brisa”, declaró ante la Fiscalía. Luego, la jovencita regresó a la casa para saber si la víctima había sobrevivido. Esperó hasta que su hermano se retirara de la habitación, ingresó y encontró a Brisa envuelta en una bolsa de plástico debajo de la cama. Lejos de entrar en shock regresó a su cuarto y con su celular se conectó por la red social Facebook con una amiga de la misma edad.
Le contó lo que había pasado; incluso que salió y pidió ayuda a gritos a los vecinos, pero cuando llegó un patrullero policial, Segundo la amenazó para que no diga nada, sino iba a hacerle daño a su padre. Para sacarse a la Policía de encima, el muchacho le dijo que había discutido y que se había ido al almacén.
Cuando los efectivos se retiraron de la casa, Ana siguió chateando con su amiga sobre lo que sucedió y le pidió que avisara a la Policía. A los pocos minutos, y tras alertar al 911, la amiga junto a su madre se hicieron presentes en la casa del asesino.
Tras golpear las manos, Segundo salió y la madre de la amiga le informó que las nenas, que son compañeras, debían hacer una tarea juntas, por lo que la iba a llevar hasta su casa. El asesino dejó ir a su hermana, mientras seguía excavando una fosa para enterrar el cuerpo de su novia.
La madre y las dos compañeritas se dirigieron directamente a la dependencia policial donde informaron todo lo ocurrido. A los pocos minutos, otro patrullero llegó y detuvo a Segundo, quien en su defensa intentó sostener que había matado a Brisa porque ésta se lo pidió.
Desde hoy, hasta el próximo lunes, Segundo será juzgado por el femicidio de Brisa. El Tribunal estará integrado por los jueces María Gabriela González (presidenta), Pablo Farah y Carolina Sanguedolce serán los vocales. Por el Ministerio Público intervendrá el fiscal penal de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas 1, Pablo Rivero. La defensa técnica del imputado estará a cargo de la defensora oficial Thelma Niederle de Leoni.
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