Se trata de Jorge Tapia quien debía conectar bombas de riego y se precipitó a un arroyo en el interior de una finca sobre ruta Nº 51. Un compañero se extrañó de su ausencia y fue quien lo encontró. La autopsia determinó muerte por inmersión.
Según informó AM 840, el hombre, quien se desempeñaba como peón rural se retiró hacia otro sector de la finca ubicada sobre ruta Nacional Nº 51, en el Valle de Lerma, para conectar unas bombas de riego, según informó Infobae.
Pasado algún tiempo un compañero de trabajo se percató que no regresaba y fue a buscarlo. Lo encontró en el interior de un arroyo. Tras el alerta fue derivado al nosocomio local pero llegó ya sin vida.
Por el hecho, intervino la justicia que pudo determinar que el fallecimiento se produjo por ahogamiento. Al parecer el hombre se precipitó mientras trabajaba en la conexión de las bombas.
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