El diputado Valdés, apoyado por Macri y Colombi, compite con el senador Espínola para acceder a la gobernación.
Todas las miradas del mundo político nacional se posarán hoy en las elecciones de esta provincia, en la que no sólo se definirá al hombre que conducirá los destinos de Corrientes por los próximos cuatro años, sino que marcará el pulso de los comicios nacionales que se desarrollarán dentro de dos semanas.
La Casa Rosada apostó todas sus fichas a la continuidad de la alianza oficialista Encuentro por Corrientes (ECO)-Cambiemos, que lleva al diputado nacional Gustavo Valdés (UCR) como candidato a suceder al gobernador radical Ricardo Colombi, cacique provincial que cumplirá en diciembre su tercer mandato, los últimos dos consecutivos, al frente de la provincia.
El respaldo quedó plasmado en las visitas de Mauricio Macri y del ministro del Interior, Rogelio Frigerio, en los dos últimos días de campaña electoral, para reclamar sin cortapisas el voto por Valdés.
El peronismo sueña con un triunfo del senador nacional Carlos «Camau» Espínola, candidato del frente Corrientes Podemos Más. Sería un envión anímico para el PJ, que todavía no logra recuperarse del golpe que significó la derrota en 2015 y que lo arrojó a un papel de oposición incómodo, según publicó La Nación.
La disputa es entre dos candidatos de una nueva generación (ambos tienen menos de 50 años) y con perfiles distintos.
Valdés tiene mucho por demostrar, ya que éste sería su primer cargo ejecutivo. Pero también tendrá que mostrar de qué madera está hecho luego de pasar la campaña electoral a la sombra de Colombi. El gobernador no parece muy dispuesto a ceder el centro de la escena ni a dejar el control de Encuentro por Corrientes, que fundó casi una década atrás luego de romper lanzas con su primo y ex gobernador, Arturo Colombi.
Por su parte, Espínola ya fue intendente de la capital correntina (2009-2013), por lo que puede mostrar gestión. Sin embargo, éste será su segundo intento por alcanzar la gobernación, tras su fallido intento de 2013, por lo que un nuevo resbalón sería un golpe muy duro para su carrera política.
Más de 810.000 personas, distribuidas en 2407 mesas, estarán habilitadas para votar hoy en esta tierra donde el chamamé es la música por excelencia, tener payé y ser baqueano puede ser más efectivo que andar bien empilchado y Taragüí significa mucho más que una marca de yerba mate.
Polarización
La elección se anticipa hiperpolarizada, aun cuando la oferta electoral disponible en el cuarto oscuro hoy presenta una tercera alternativa. Se trata de la lista del partido Proyecto Popular, un grupo de dirigentes de Pro que quedó afuera del armado oficialista y que impulsa la fórmula Sebastián Ríos Brisco-Lorena Macri.
Sin embargo, parece difícil que ésta fuerza pueda romper la marcada polarización que anticipan las encuestas para la votación de hoy. En este escenario, todo indica que esta noche se conocerá el nombre del nuevo gobernador sin necesidad de apelar a un eventual ballottage, previsto para el último domingo de octubre.
Al igual que la Nación, esta provincia cuenta con sistema de segunda vuelta electoral. Para evitarla, el ganador debe superar el 45% de los votos o romper la barrera del 40% con una ventaja de 10 puntos sobre su más inmediato perseguidor.
Cuando las encuestas cada vez son menos creíbles, hay números para todos los gustos. En el equipo de Espínola aseguran que «hay paridad» y hacen hincapié en que había un 12% de indecisos. El oficialismo, por su parte, difundió anteayer un trabajo que le da a Valdés el 49,5% y a su rival el 37,2 por ciento.
Corrientes llega a esta elección luego del inédito proceso de tranquilidad institucional. En diciembre se completará el cuarto mandato constitucional consecutivo. Atrás parecen haber quedado las 19 intervenciones federales que sufrió la provincia. Sin embargo, no ha dejado de ser una provincia superpolitizada. Basta con mencionar que el frente ECO-Cambiemos está integrado por 23 partidos políticos y que en Corrientes Podemos Más conviven 19 agrupaciones.
Es tan particular la vida política correntina que Valdés, el candidato oficialista, lleva como compañero de fórmula al actual vicegobernador, Gustavo Canteros, un dirigente de extracción peronista (tanto, que ayer almorzó con José «Pepe» Scioli, en un restaurante de esta capital). Del otro lado, Espínola va acompañado por Eugenio «Nito» Artaza, ex senador nacional por la UCR y ahora referente local del massismo.
Otro dato a tener en cuenta, porque podría demorar el escrutinio, es la gran cantidad de listas colectoras habilitadas. Entre los dos frentes principales suman cerca de 2500 papeletas.
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