El cuervo venció al mirasol en el primer partido del Regional Federal Amateur por 4 a 0. El paraguayo metió un doblete, tras los goles de Reyes y Quiroz.
Fue solo el primer paso. Central Norte arrancó anoche un nuevo desafío con la obligación de siempre: ascender. Y en el debut logró superar, con goleada, a un modesto Atlético Peñarol por 4 a 0.
Unas de las notas salientes de la noche en el Martearena fue la presentación de Ronaldo Martínez, quien selló la goleada con un doblete en tres minutos. Vaya presentación del paraguayo.
Más allá del abultado resultado, el cuervo tiene mucho para mejorar, también su rival.
El primer tiempo fue parejo, con situaciones parecidas en ambos campos, imprecisiones y líneas cortadas. Con pocas ideas jugaron tanto el cuervo como el mirasol en los primeros minutos. A Central le faltó profundidad y mejor circulación. Se notó que es el primer partido después de una larguísima inactividad. El retroceso del equipo conducido por Medrán tampoco fue bueno. Con un Peñarol que siempre hizo lo que pudo apoyado en la velocidad de Silvio Mogro. Es que el equipo de Burgos fue más ganas que fútbol. A Central le faltó juego, Peñarol no fue la excepción.
Un párrafo aparte para Mauricio Pegini, el reemplazante de Mariano Maino en esta temporada. El ex-Mitre le dio seguridad al equipo y respondió siempre bien. Lucas Quiroz fue otro que mostró algunos destellos en el primer tramo del partido. La noche encima no empezó bien para el cuervo, ya que Patricio Krupoviesa debió pedir el cambio por lesión (lo reemplazo Nicolás Aguirre). Y al menos Fabricio Reyes tuvo el olfato goleador intacto: tras un tiro de esquina, el delantero la empujó con un cabezazo para poner en ventaja a Central. Parecía que el equipo de Medrán se había despertado e iba a llevarse por delante a su rival, pero nuevamente bajó el nivel.
Es que Núñez, su socio de la ofensiva, estuvo desconectado y ni con la expulsión de Farías, con la que Peñarol quedó disminuido, pudo sacar ventaja.
El segundo tiempo fue más o menos lo mismo. Central se ordenó mejor en el campo y apostó a sus individualidades. En este contexto, apareció nuevamente Quiroz para marcar un golazo de larga distancia y darle tranquilidad al equipo cuervo. Peñarol pasó a jugar con 9 porque agotó los cambios y se lesionó Mauro Magro. Luego vino el turno del paraguayo Ronaldo Martínez, quien en tan solo tres minutos se encargó de cerrar el partido con dos goles, el primero fue con una chilena espectacular, el segundo fue con un remate cruzado, luego de un buen pase de Reyes.
El debut del cuervo termina siendo muy bueno por la contundencia, pero el equipo de Medrán debe mejorar mucho para confirmar sus aspiraciones en el torneo.
Fuente: El Tribuno
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