El delantero y capitán del Barcelona convirtió un gol y dio dos asistencias claves en la victoria catalana.
Después de más de tres meses de ausencia, pudimos volver a disfrutar de ver a Lionel Messi en una cancha.
El argentino cumplió con un gran partido, como nos tenía siempre acostumbrados y se despachó con un gol y dos asistencias. Pero, además de eso, hubo varias estadísticas para resaltar.
Lío tocó la pelota en 98 oportunidades, la gran mayoría en el costado derecho de la cancha y casi siempre en tres cuartos de la misma. Apenas 12 de esos 98 totales fueron en su propio campo.
Además, el argentino se paró de forma muy clara entre la banda derecha y el medio, siempre moviéndose y generando situaciones a unos metros del área rival.
El Mallorca atacó poco, por lo que no se vio muy obligado a pisar su campo para llevar la pelota nuevamente a la ofensiva.
El capitán del conjunto catalán generó seis chances de peligró y pateó tres veces. Una fue gol, sobre el final del partido y con pierna derecha.
En las otras dos oportunidades primero le bloquearon el remate y el otro se fue por arriba del travesaño.
Cabe destacar que el rosarino también realizó un total de 72 pases, de los cuales 59 fueron acertados y recibidos por sus compañeros. Acá también se notó su posicionamiento en la banda derecha, ya que la gran mayoría fueron para la izquierda o para adelante.
Le hicieron apenas tres faltas y no cometió ninguna, finalizando un partido a puro fair play. Lo curioso es que las tres infracciones que recibió fueron en su propio campo. Además, se destacó con tres recuperos de pelota.
Pero lo más llamativo fue el gol. Messi tiene 698 goles a lo largo de su carrera entre Barcelona y Selección. El 13 por ciento de ellos los ha anotado con la gamba derecha. Es decir, 91. Menos mal que es la que menos usa.
Sacando a los goleadores, cualquier jugador de campo daría todo por tener esa cifra con la pierna menos habitual.
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