Villalba libró cheques cuando ya no era intendente y nunca declaró

A los $16 millones no rendidos se suman valores que recibió su propio exasesor legal. La denuncia fue formalizada hace un año, pero la causa no avanza ni hay procesados.

En un expediente iniciado en 2014 y después que la Auditoría General de la Provincia emitiera un informe en el que reveló que Carlos Villalba, exintendente de Salvador Mazza, utilizó recursos del municipio por $16 millones que nunca rindió, ahora cobra actualidad la emisión de cheques cuando ya está destituido.

Pese al hermetismo judicial, El Tribuno accedió a esa información que expone estas irregularidades tanto o más graves que el delito descubierto por la Auditoría.

Pero este probable fraude a la administración pública, que el artículo 174 del Código Penal determina como peculado, malversación de caudales y encubrimiento, no tiene por el momento a ningún responsable procesado.

La maniobra se descubrió cuando el tenedor de un cheque librado meses después de que Villalba dejara de ser intendente, se presentó a cobrarlo y como no pudo concretar su cometido, ejecutó ese valor. Pero el tenedor era, nada más ni nada menos, que Sergio Gabriel Calvo Moscoso, asesor legal del municipio durante la gestión del exintendente.

Destituido con chequera

Carlos Villalba se desempeñó como intendente hasta el 23 de agosto de 2013, fecha en la cual el municipio fue intervenido por decisión del Poder Ejecutivo a instancias de la Legislatura. Esto ocurrió casi en simultáneo con otro hecho que lo involucró, cuando fue detenido por Gendarmería en un prostíbulo de la capital, en el marco de una investigación por trata de personas.

El gobernador Juan Manuel Urtubey designó como interventora del municipio a Mercedes Alba Junco, quien el mismo día juró en ese cargo que se extendió hasta el 10 de diciembre. En las elecciones de mayo ya había ganado la Intendencia Rubén Méndez Salazar, actual jefe comunal.

Pero en diciembre, el abogado Calvo Moscoso se presentó con el cheque Serie A N§ 50810410 por la suma de $1.800.000 librado a su favor el 29 de noviembre de 2013 por Carlos Villalba, es decir, cuando ya no era intendente.

Como Calvo Moscoso no pudo cobrar el cheque, supuestamente librado por pago de honorarios, trabó un embargo al municipio (expediente 23.790/14) que se tramita en el Juzgado Civil y Comercial de Tartagal.

Con todas esas evidencias, el actual asesor legal del municipio fronterizo, Oscar Pedro Guillén, formuló denuncia penal contra Villalba y Calvo Moscoso. A pesar de la gravedad de los hechos, pasaron dos años desde la denuncia interpuesta contra ambos exfuncionarios. La causa, que fue remitida a la Fiscalía de delitos económicos que transitoriamente está a cargo de Pablo Cabot, no tiene procesados y ni Villalba ni Moscoso nunca fueron citados a declarar por esa causa.

Honorarios: Se desconocen las razones por las que Villalba le pagaba al asesor letrado la exorbitante suma de $1.800.000 en concepto de honorarios.
Cifras que alarman: La cesión de derechos pagada con otros cheques supera los $600.000. Y la cifra sin rendir es de $15.990.083.
Sin respuestas: El Tribuno intentó en varias oportunidades escuchar la palabra de Villalba, pero nunca respondió a la requisitoria.
Otros hechos de gravedad

El abogado Oscar Pedro Guillén no solo confirmó la denuncia referida al libramiento extemporáneo de cheques por parte de Villalba, sino que agregó otros datos. «He sido asesor legal de varios municipios y realmente a veces se ven algunos manejos que no son los ideales y a los que los intendentes recurren para poder cumplir con los sueldos del personal, evitar conflictos, no parar una obra en ejecución y ese tipo de cosas. Pero lo que sucedió en Salvador Mazza no lo había visto nunca. Son delitos gravísimos y, sin embargo y pese al tiempo transcurrido, no tienen ningún imputado. En mi opinión personal varios ya deberían estar presos», opinó.

A los dos hechos antes mencionados se suma otro: Villalba había alquilado una propiedad en la capital, sobre la calle Lerma, como residencia eventual del intendente de Salvador Mazza, es decir para cuando realizaba trámites y gestiones. Antes de ser destituido abonó al locatario la suma de $800.000 más otros $500.000 por «daños y perjuicios», aunque nunca se explicó en qué podrían consistir esos daños ni las razones de una suma tan elevada en concepto de alquiler. Para sumar a la «sorpresa», los copropietarios del inmueble son el mismo abogado Moscoso y otra persona identificada como Jaime Macedo.

Hay más

Pero el libramiento de cheques del municipio sin ser intendente y a favor de su asesor legal no es lo único que hizo el exintendente. Con fecha 23 de septiembre, un mes después de ser destituido, Villalba realizó una cesión de derechos de demandas en contra del municipio a favor de otro abogado salteño Marcelo Facundo Nievas Contreras, domiciliado en Ameghino 273 de la capital. Esa cesión se abonó con cheques del municipio por la suma de $618.909,96. Como no hay investigación, nunca se pudo determinar en concepto de qué deuda o por qué motivo se hizo esta cesión de derecho a favor de un letrado que no figura ni como proveedor ni prestando ningún tipo de servicios profesionales al municipio.

Guillén consideró que «no podemos cargar las tintas sobre el fiscal Cabot a cargo interinamente de la Fiscalía de delitos económicos». Cabe recordar que Cabot asumió ese cargo en reemplazo del actual juez Anastacio Vázques Sgardelis. «Soy consciente de que el magistrado está sobrepasado de trabajo, muchas causas tienen personas detenidas y la complejidad de esa fiscalía es tan grande que no puede compararse a ninguna otra de la provincia. No obstante, ya transcurrió el tiempo para que se comience una investigación».

Remarcó que las pruebas documentales están presentadas, no hay forma de que sean desestimadas como el caso de los cheques y el informe de la Auditoría. «Deberían estar tras las rejas y ni siquiera fueron citados a declarar», reiteró.