Hubo vientos huracanados en Morillo. Se volaron varios techos, suspendieron las clases y medio pueblo está sin luz. El fenómeno afectó a varias zonas del Chaco salteño.
Los vientos fuertes de la madrugada trajeron grave consecuencias en Rivadavia Banda Norte, en pleno Chaco salteño. Las ráfagas volaron el techo de un vecino afectando a un colegio secundario de la ciudad de Morillo.
Esta mañana circularon imágenes del colegio Nº 5041 «Nuestra Señora de Fatima», ubicado en Hipolito Yrigoyen 4554, de la ciudad de Coronel Juan Solá donde se ve que el viento se llevó un tinglado y que, con el desprendimiento de las chapas, tiró además las columnas que lo sostienen. Los destrozos afectaron a un aula del edificio donde funcionan dos instituciones educativas. Una es el colegio secundario 5041 y además funciona la Escuela de Educación Técnica 3128 con tres turnos. El secundario tiene casi 40 años y la técnica más de 50. Se trata de un edificio muy antiguo y en estos momentos están analizando si el derrumbe del tinglado vecino afectó a otras partes del inmueble educativo.
«A las 2 de la madrugada comenzó a soplar un viento muy frío del sur; que luego se hizo más intenso. Esta mañana ya notificaron a los padres que las clases en ese colegio están suspendidas», informó el vecino Félix Rodríguez.
El viento también afectó a varios vecinos por la voladura de techos de sus viviendas, tumbó varios árboles y el paisaje urbano por estos momentos es desolador.
Sin energía eléctrica
«Fue un viento tremendo», informó una vecina del centro. «Ahora medio pueblo está sin luz. Hay una enorme cantidad de árboles y postes caídos. Les pedimos a las autoridades que suspendan todas las clases porque los chicos andan por las calles con los cables tirados y no sabemos si tienen energía o no», dijo la mujer.
Casi con una premonición, los vecinos reclamaban hace un año por mejor servicio ante un corte de luz de 46 horas con temperaturas superiores a los 40 grados. A mediados de noviembre de 2020 los vecinos tomaron las oficinas de la empresa Edesa en reclamos por el servicio de luz. Denunciaron la cantidad de horas que pasaron sin energía eléctrica y exigieron que el gobernador Gustavo Sáenz ponga a trabajar a los funcionarios porque sólo había dos operarios para toda la ruta nacional 81. Hasta Carlos Saravia, el titular del Ente Regulador de Servicios Públicos quedó en la mira en la revuelta.
Ahora, por un fenómeno meteorológico quedaron sin energía eléctrica y esperan que rápidamente vuelva la luz.
Por su parte desde las Estación Meteorológica Orán, también afectado por el tempora, informaron que la velocidad de los vientos en horas de la madrugada llegaron a las 65 km por hora ocasionando caída de árboles, postes de servicios que provocaron el corte del suministro de energía eléctrica en algunos sectores.
Como consecuencia del temporal se realizó un operativo de limpieza para el retiro de árboles, ramas y postes caídos.Desde el municipio se solicitó a los vecinos que colaboren con la información de las zonas más críticas Soledad Giménez, responsable del área de Servicios Públicos, informó que hoy se terminará con lo grueso de lo que dejó el temporal (árboles caídos, postes, etc.) y por la tarde se hará el barrido.»Teniendo en cuenta que todavía hay postes caídos o en situación de riesgo además de árboles como consecuencia de los vientos durante la madrugada, trabajando dos cuadrillas de la Municipalidad en el tema» informó la funcionaria
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