España ganó con justicia el Mundial de básquet de China y la tristeza tomó a los jugadores argentinos. Sobre sus caras caen las lágrimas que reflejan la desilusión por no haber coronado con el título el brillante torneo que hicieron.
Sin embargo, una vez que pasaron por la ceremonia final, y se subieron al segundo escalón del podio, hablaron con los periodistas presentes en China, como lo hicieron tras cada final de partido. El sentimiento fue unánime: se mostraron orgullosos por todo el camino recorrido.
«Son justos campeones, España era un gran rival y no pudimos. El mundial en términos generales fue espectacular. En nuestras cabezas llegar a la final era uno de los objetivos pero en la cabeza de todos no, por eso llamó la atención», apuntó Luis Scola en zona mixta, y añadió: «Vamos a tomar conciencia de lo que hicimos dentro de unos minutos. Vamos a ver lo qué logramos estas dos semanas con el paso del tiempo. Pero ahora toca estar tristes y felicitar a España», analizó el capitán.
Por el mismo camino fue Gabriel Deck, autor de 24 puntos en el partido final, y una de las figuras del conjunto argentino. «Ahora no puedo decir nada, es una tristeza terrible. Tenemos que destacar el tremendo campeonato que hicimos, obvio hubiésemos querido levantar la copa pero seguramente vamos a poder alcanzarla en un futuro», describió el jugador de Real Madrid.
«A medida que pase el tiempo vamos a darnos cuenta de todo lo que hicimos. Se notó en cada partido el compañerismo y la humildad del equipo. Ojalá que este equipo marque una linea para el futuro», apuntó el alero. «Todo el equipo dio lo mejor en todos los partidos. Logramos un gran objetivo como es ir a los Juegos Olímpicos de Tokio, y no nos conformamos. Nos metimos en la final y le jugamos de igual a igual a un gran equipo como es España. Nos vamos con la frente en alto», cerró en la zona mixta.
El estratega detrás de este equipo que sorprendió a todo el país fue sincero tras el resultado final. Se mostró orgulloso por todo lo logrado, destacó el compromiso y humildad de los jugadores pero no ocultó sus ganas de haber ganado la medalla de oro. «España podría haber sacado más diferencia de la que sacó, nuestro corazón hizo que lo mantengamos ahí peleando, pero en juego nos dominó absolutamente, simplemente fueron mucho mejores que nosotros», explicó Sergio Hernández. «Obviamente si volviéramos a jugar, volveríamos a pensar en que le podemos ganar, pero hoy no pudimos».
«El torneo que hicimos nosotros fue fantástico, maravilloso, acabamos de perder nada más y nada menos que la final del mundo o de ganar la plata; yo creo que acabamos de ganar la plata, aunque yo siempre quiero ganar y sobre todo ganar el último partido», describió del paso de la selección por el Mundial de China. Un rato después, ya en la conferencia de prensa, estaba totalmente convencido de su idea: «No perdimos la medalla de oro, ganamos la de plata», sacó pecho.
«Insisto que cuando hablo de equipo, es el equipo que mejor jugó de todos los que dirigí en mi vida y combinó carácter, fiereza, inteligencia, control, en casi todos los partidos, menos hoy, estoy agradecido a ellos y súper orgulloso», dijo el entrenador.
Respecto del partido, Hernández señaló: «Argentina no pudo porque España tiene jugadores que juegan en los mejores equipos del mundo, y tienen recambios que la gente no conoce y que también están en equipos top del mundo».
Fuente: La Nación
Cargando ...
Agregue un Comentario