Los 14 delincuentes que se habían fugado de la Comisaría 42 de esa ciudad norteña ya se encuentran otra vez tras las rejas. Más de 200 policías trabajaron para la recaptura.
Manuel Segocia, de 19 años, el último de los 14 fugados de la Comisaría 42 de Tartagal, se presentó cerca de las 11 de la mañana en la Unidad Regional Nº 4, y de esta manera todos los delincuentes fueron recapturados. De los diferentes operativos trabajaron más de 200 policías, según informó El Tribuno.
La masiva fuga de hombres privados de la libertad se produjo en la madrugada del jueves, noche en la que la ciudad norteña de Tartagal sufrió varios cortes de energía eléctrica, según la versión oficial que se dio a conocer a la opinión pública desde el Ministerio de Seguridad de Salta. Frente a los intermitentes cortes, algunos de ellos con una duración considerable, los presos se fugaron por una ventanilla (ventiluz) ubicada en el baño de la dependencia.
Para concretar la fuga alguien tuvo que habérselas ingeniado para burlar los controles en la dependencia policial, fue así que uno de los 14 presos tenía en su poder un elemento con el que pudieron cortar al menos cuatro barrotes del ventiluz del baño, por donde salieron.
Por el grave hecho ocurrido la semana pasada desde la Jefatura de la Policía de Salta se dispuso la suspensión del encargado directo de custodiar a los detenidos aquella madrugada. Hasta el momento se supo de una sola suspensión. Si bien no es la primera vez que en dicha dependencia personas detenidas logran escaparse, esta vez la fuga implicó a 14 detenidos, salvo uno de ellos -acusado de abuso sexual-, el resto está por daños a la propiedad, es decir no son considerados de ‘máxima peligrosidad‘.
Megaoperativo
Ni bien se supo de la fuga, se desplegó un megaoperativo policial en el norte salteño. Según fuentes policiales, en la búsqueda trabajaron más de 200 policías de distintas áreas operativas y diferentes Unidades Regionales de la provincia, con el apoyo de otras unidades especiales pertenecientes a otras ciudades.
Se intensificaron operativos y controles vehiculares móviles en puntos estratégicos fijados en base a la información que iba surgiendo de las respectivas investigaciones, se reforzó la frontera y se trabajó de manera articulada con fuerzas nacionales y de Bolivia. Hoy la historia de los fugados en Tartagal podría cerrar un nuevo capítulo si es que Segovia decide entregarse por voluntad propia a la Justicia.
El funcionario destacó a la Unidad Regional 4 y el valioso aporte de la comunidad norteña para colaborar con el operativo de seguridad.
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