Un informe de la línea nacional 145 la ubica por arriba de Tucumán y Jujuy.Explotación sexual, captación de víctimas y búsqueda de personas lideran los casos.
De las provincias del Noroeste Argentino, Salta es la que tiene más hechos denunciados relacionados con la trata de personas, por encima de Jujuy y Tucumán. Esto se desprende del informe que realizó la línea nacional 145 sobre registros del 2018. La línea gratuita recibe de manera anónima denuncias contra la trata y explotación. Casi el 80 por ciento de los llamados realizados desde Salta durante el 2018 se vincula con casos de explotación sexual, posible captación de víctimas y búsqueda de personas.
En Salta se denunciaron 36 hechos, mientras que en Tucumán, 33 y en Jujuy, 29. La provincia quedó como primera en el NOA y novena a nivel nacional. En detalle, la posible captación de víctimas fue la situación más reiterada, con un 36 por ciento. Le siguen las denuncias sobre búsqueda de personas, con un 22 por ciento, y en tercer lugar explotación sexual con el 19 por ciento. Eso implica que las personas sobre las que se desconoce dónde están generan la mayor cantidad de pedidos de ayuda. Mientras que en Jujuy y Tucumán estas cifras cambian y las denuncias por explotación sexual lideran los índices.
Sin embargo, las estadísticas muestran que no todos los casos se denuncian judicialmente. En la línea 145 no solamente se asesora, sino que también se deriva a los organismos correspondientes para que los casos sean judicializados. En este sentido, Tucumán lidera en causas iniciadas. Si bien registra menos hechos denunciados que Salta, en la provincia vecina se asentaron 49 denuncias judiciales. En Salta fueron 42 y en Jujuy, 32.
Si bien la explotación laboral afecta más a varones, los casos de trata en general tienen en su mayoría a las mujeres como víctimas y a los varones como victimarios. De las más de 3 mil llamadas recibidas a nivel nacional, el 45 por ciento se hizo para denunciar a varones, el 19 por ciento a mujeres y un 10 por ciento a un «grupo de personas».
En este misma línea, las mujeres son las que más piden ayuda: en Salta el 60 por ciento de las comunicaciones fueron realizadas por mujeres. Esta tendencia se mantiene en el NOA. Por otra parte, a la mayoría de los llamados los hacen personas que no son las víctimas sino terceros que se enteran de la situación de explotación.
La línea 145 ofrece la posibilidad de denunciar anónimamente, lo que a veces alienta a los testigos a aportar información sobre casos delicados que muchas veces implican connivencia judicial, política y de fuerzas de seguridad. En Salta, casi la mitad llamó anónimamente: el 48 por ciento.
A nivel nacional, un 15 por ciento denunció algún tipo de complicidad. Ese porcentaje aumenta cuando las comunicaciones son anónimas. Sobre más de 900 llamados realizados por personas que no dieron sus nombres, en el 20 por ciento se habló de connivencia de funcionarios.
Durante 2018 hubo un promedio de 169,75 denuncias mensuales, mientras que en 2017 fue de 184,6 y en 2016 de 173,4. Se advirtió que la baja de denuncias no debe leerse como que hay «menos casos», sino que pueden incidir factores como la falta de recursos para denunciar.
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