Así lo aseguró el intendente capitalino, quien manifestó que su espacio político está abierto y que apunta a la construcción del futuro de Salta. «Los enemigos son la pobreza, la desocupación, la falta de oportunidades para los jóvenes”, expresó.
Acompañado por intendentes, concejales, senadores, dirigentes y vecinos en el salón del Centro Argentino de Socorros Mutuos, el intendente capitalino y precandidato a gobernador Gustavo Sáenz, llamó a la sociedad salteña a «dejar de lado los egoísmos y las mezquindades».
En la oportunidad, aseguró que su espacio político está abierto a todos aquellos que quieran sumarse. “Yo no quiero ser el candidato de nadie, quiero ser el candidato de la gente, recibamos a todos, peronistas, radicales, independientes, macristas, kirchneristas lo que quieran que se suman a este gran frente salteño que va a pelear por Salta”, manifestó.
Además aseguró que los principales enemigos son la pobreza, desocupación, falta de oportunidad para los jóvenes, y tanta otras cosas más. “La patria nos pide basta de divisiones, de resentimientos, de generar odios entre nosotros, peleemos por nuestros hijos, nietos, el futuro de Salta para que podamos demostrar que se puede trabajar en forma conjunta”, dijo.
También recordó sus inicios en la política y el aprendizaje logrado tras perder las elecciones de Senador con Gabriela Serrano en 2013. «Hace unos años atrás muchos creían que este hombre que había nacido trabajando en la política, recorriendo los barrios, se había caído, había perdido, pero se equivocaron, había aprendido», finalizó.
Por último, se definió como un peronista de alma.
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