La propietaria, radicada en Chile, se enteró por los vecinos que ofrecían su vivienda por internet. Viajó y solicitó el desalojo de la mujer y su familia.«Yo estaba en Perú cuando me enteré que mi casa de La Almudena estaba en venta. Si mis exvecinos no me ubican me hubiera quedado sin mi casa en Salta, que yo había alquilado a una falsa abogada. Hace dos días que estoy en Salta intentando por todos los medios el desalojo de esta persona que, dicho de paso, no solo me quiso vender la propiedad en 188.000 dólares sino que debe por luz, agua y gas más de 9.000 pesos y 55.000 pesos de alquileres vencidos, porque solamente pagó el primer mes de alquiler y luego nunca más».
Marta Alejandra Vargas, de nacionalidad chilena, dijo ayer a El Tribuno que no sabe muy bien la metodología que iba a utilizar su inquilina para poder enajenar su propiedad, pero aseguró que esa mujer -cuando ella la conoció- dijo ser abogada del foro local con mucha influencia en distintos planos de la sociedad salteña.
«Cuando hicimos el contrato ella pidió rebajas por el alquiler y de 12.000 pesos arreglamos en 11.000. Sé por mis vecinos que hace unos días apareció mi casa en venta en un sitio de la web. Inmediatamente el abogado de La Almudena se comunicó conmigo para preguntarme sobre la transacción y allí caí en cuenta que estaban vendiendo mi propiedad y que quien lo hacía era la inquilina», afirmó.
«No sé si recibió dinero adelantado, pero cuando llegué a Salta me di con un montón de personas a quien esta mujer ya había timado», añadió.
Según algunos de los perjudicados en otras maniobras dolosas en las que está denunciada -como la venta de acciones de un boliche de la Balcarce, un negocio gastronómico y de una casa a varios compradores-, la mujer identificada con las siglas V. P. se hace pasar por propietaria, les muestra el bien o negocio a vender y solicita adelantos de dinero porque siempre hay una oferta mejor que está en camino.
«El precio que utiliza es siempre inferior a la tasación y eso hace atractivo el negocio para los incautos que le adelantan dinero por algo que no le pertenece y luego si llega a concretar la operación los papeles nunca los entrega», advirtió días atrás Silvia Di Piazza, una de las damnificadas por V.P. en una nota que se publicó en El Tribuno.
«Cuando se investiga el bien vienen las sorpresas y ella sigue en libertad y las acciones y denuncias nunca la alcanzan», dijeron otras dos de sus últimas víctimas.
Dos casos
Silvia Di Piazza y Ariel Alfie fueron los primeros en hacer públicas las andanzas de V. P., quien ya habría estafado a decenas de personas, aseguran ambos. «No solo nos estafó y se quedó con nuestro dinero y bienes sino que además se presenta como abogada del foro local», dijeron al unísono Alfie y Di Piazza.
«A nosotros nos estafó con la venta de un boliche en la Balcarce, que ya había vendido a tres personas más. Luego la sandwichería de avenida Líbano que me vendió sin tener ella título de propiedad del negocio y lo peor la venta de una casa en Cerrillos, vendida antes a otra persona», denunció Alfie.
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