Dijo Natalia, su hija en las puertas de Ciudad Judicial cuando marcharon por la liberación del comerciante. Aseguró que el nivel de inseguridad en la zona es insostenible. «Nos tuvimos que ir de la casa» agregó.
Familiares de Ricardo Cuellar, el vecino de Castañares que mató a un ladrón que encontró dentro de su negocio, se manifestaron en las puertas de Ciudad Judicial pidiendo que sea liberado. Natalia una de sus hijas, dijo a la prensa que le “parece injusto que él esté detenido cuando lo único que hizo fue defender a su familia, queremos que la justicia actúe rápido porque están las pruebas de que todo fue en defensa propia”.
Agitando pancartas contó que no era la primera vez que entraba a robar y que todas las denuncias están asentadas. “Con mi marido nos tuvimos que ir de la casa porque la inseguridad es insostenible” agregó.
Contó que el negocio funciona hace 30 años “comenzó con algo muy chiquito, ese negocio creció gracias a su trabajo, es un hombre de trabajo y por eso exijo a la justicia que actúe con rapidez”.
Natalia contó que la familia vive encerrada por miedo, debido a que el ladrón fallecido vivía en la misma cuadra. En eso también coincidió la esposa de Cuellar, quien en diálogo con El Tribuno dijo que por la cantidad de robos ella y sus hijas pequeñas debían irse todas las noches a la casa de su madre.
Ayer fueron recibidos por la fiscal que investiga el caso, quien les explicó cómo se desarrolla la investigación.
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