Kevin Spacey, Bill Cosby, Harvey Weinstein… La lista se agranda. Los medios estadounidenses se conmocionaron con la noticia.
El actor estadounidense Nicolas Cage fue acusado de abusar de una ex novia durante un reciente festival de cine en Viena, Austria, el pasado 20 de septiembre.
Según documentos judiciales obtenidos por el sitio estadounidense The Blast, la mujer denunciante, llamada Vickie Park, afirma que estuvo saliendo con Cage desde junio de 2017 y que estuvo con él el 20 de septiembre de 2018 cuando la abusó después del Slash Film Festival en Viena. Además, indicó que el actor estaba «gravemente intoxicado en ese momento».
A su vez, en la solicitud judicial, Park indica que Alice Kim, la ex esposa del intérprete, la acosa a través de las redes sociales y, producto de ello, tiene «mucho miedo» de salir de su casa.
Según indica el portal, el juez en el caso negó la solicitud de Park de una orden de restricción hasta la próxima audiencia, que se llevará a cabo a fines de este mes. Sin embargo, un allegado a Cage se comunicó con The Blast y negó la historia.
«Nicolas y Alice niegan categóricamente las acusaciones absurdas que figuran en la presentación de una orden de restricción temporal contra ella, que fue denegada por el tribunal», sentenció.
Luego de 12 años de matrimonio, el actor se separó de Kim en enero de 2016, poco antes de que comenzara a grabar su última película, Mandy. La ex pareja tiene un hijo común, un niño llamado Kal-El, de 13 años.
Cage fue noticia en enero pasado por haberse comido toda su fortuna. Llegó a vivir como un rey, compró 15 casas y hasta fósiles de dinosaurio. Ahora, endeudado, acepta pequeños trabajos para pagar sus deudas.
Nicolas redujo su patrimonio de 150 millones de dólares a 25 millones y, según Daily Mail, los impuestos de todas sus propiedades superan los 14 millones de dólares.
Llegó a tener una colección de cómics por valor de más de 1,6 millones de dólares, incluido el primer número de Action Comics, en el que figura la primera aparición de Superman y que se editó en 1938.
Sus otro gran capricho: los animales exóticos. Por ejemplo, compró dos cobras albinas por 270.000 dólares y un pulpo gigante por 150.000 dólares.
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