El pintor y dibujante Alberto Klix Cornejo, «El Fiaca», murió ayer en Salta, su ciudad natal, a donde había regresado para presentar el viernes un libro sobre su obra en la ExpoLibros.
Klix Cornejo nació en Salta en agosto de 1944 y desde 1972 que residía en Bella Vista, provincia de Buenos Aires. De formación autodidacta, recibió entre otros, el primer premio en Dibujo del XXIX Salón Nacional de Dibujo y Grabado en 1993 y el Gran Premio de Honor Presidente de la Nación en el XXIV Salón Nacional de Dibujo en 1998.
Lo primero que su obra detona a la vista atenta del espectador es la fuerza expresiva de la línea, la sobriedad profunda del trazo y la subordinación total del color a la estructura de las formas construidas por ambos. El dibujo es el centro de toda la composición, a partir de él surgen las imágenes que, en su estructuración caricaturesca, nos aluden a mundos creados a partir de una realidad sufriente. Es una mirada socarrona del mundo, un modo de mostrarlo como una broma grotesca e irónica.
Klix abreva fundamentalmente en la gramática del neoexpresionismo alemán de la primera posguerra, tanto en su mirada aguda y la organización de las formas como en la estructuración del espacio.
En abril de este año, el Museo de Arte Contemporáneo había hecho una muestra con su obra.
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