Este viernesMurió el periodista Juan Antonio “Fito” Abarzúa

Dueño de una pluma aguda, de ironía exquisita, dejó una fuerte impronta en el periodismo de Salta.

Tras un largo padecimiento murió este viernes 23 de julio Juan Antonio “Fito” Abarzúa, “el chileno”,  dejando un hondo pesar entre quienes lo conocieron personalmente.

“Fito” incursionó en la radio y la televisión y en algunas oportunidades hizo trabajos de comunicación institucional al llegar a Salta desde Santiago de Chile tras el derrocamiento del gobierno de Salvador Allende y la instauración de la dictadura de Augusto Pinochet que lo había amenazado de muerte. Al momento del golpe en el país vecino trabajaba en la Oficina de Informaciones y Radiodifusión de la Presidencia de la República (OIR) del gobierno de Unidad Popular encabezado por Allende. Con 24 años había terminado hacía poco sus estudios de Comunicaciones Sociales en la Universidad Católica del Norte, en Antofagasta.

En los ?80,, con el regreso de la democracia a la Argentina, encaró en Salta la creación del semanario Propuesta  junto a Alfredo “Bujía” Jeréz  y Nelson “el paraguayo” Rojas lo que  representaba un verdadero desafío periodístico y editorial ya que suponía romper la hegemonía que por esos días tenía el diario El Tribuno en la prensa gráfica. Fue un éxito periodístico pero la situación económica del país y circunstancias locales golpearon el ímpetu y la genialidad de la tríada escribiente. Cada uno de ellos tomó rumbos distintos dentro del periodismo salteño. “Fito” fue el último en dejar este mundo.

Luego del proyecto del semanario propuesta, Salta no se privó de su pluma, “el chileno” incursionó en medios digitales para pasar luego al diario El Tribuno lo que significó un giró vertiginoso y virtuoso para ese diario en las secciones provinciales y policiales, en donde a su genialidad innata le sumó la experiencia y madurez.

Fue particularmente en las noticias policiales en donde su pluma desplegó un estilo consonante con su característica de observador agudo. Una síntesis de su trabajo puede ser trazada con una anécdota: un reconocido y veterano periodista de Buenos Aires que eligió Salta para pasar sus últimos años, pidió conocerlo al llegar a esta ciudad, describía que «al leer algunas notas, bien podrían ser trazos de un García Márquez de policiales”.