La Justicia Federal hizo lugar a una acción de amparo promovida por la Asociación Civil por la igualdad y la Justicia que ordenaba a la Secretaría de Gobierno de Salud de la Nación que «informe las razones de la suspensión de la vacuna contra la meningitis a niños de 11 años».
La Justicia Federal hizo lugar a una acción de amparo promovida por la Asociación Civil por la igualdad y la Justicia (ACIJ) que ordenaba a la Secretaría de Gobierno de Salud de la Nación, encabezada por Adolfo Rubinstein, que «informe las razones de la suspensión de la vacuna contra la meningitis a niños de 11 años», aunque un laboratorio informó a Télam que esa Secretaría le pidió 400.000 dosis «para cumplir con el esquema».
La meningitis meningocócica es una infección en la cobertura delgada que rodea el cerebro y la médula espinal y es causada por varios serogrupos de la bacteria Neisseria meningitidis. Los más predominantes en la Argentina son el W y B
El amparo pedido por ACIJ fue aceptado ayer por la jueza federal María Alejandra Biotti, aunque la acción judicial fue promovida en febrero, «luego de que la Secretaría de Gobierno de Salud incumpliera una decisión de la Agencia de Acceso a la Información Pública de diciembre de 2018, que intimaba al Gobierno a explicar los fundamentos técnicos y científicos de la suspensión de la vacuna».
El ex Ministerio de Salud (actualmente Secretaría) anunció la suspensión de la vacuna contra la meningitis para la población de 11 años –incorporada al calendario de vacunación en 2015– en agosto de 2018, poco después de que Argentina acordara el primer plan de ajuste con el FMI.
«Hasta el momento, la Secretaría de Gobierno de Salud nunca explicó las acciones que llevaría a cabo para reanudar la aplicación de esta vacuna, qué sucedió con los fondos destinados a la compra de esas dosis ni los detalles de su sistema de compra y distribución», denunció ACIJ.
«La suspensión de la aplicación de vacunas otorgadas gratuitamente por el Estado es una regresión en la garantía de derechos que debe ser justificada en relación a la realización del resto de los derechos humanos, y en el contexto del aprovechamiento máximo de los recursos disponibles», apuntó ACIJ al dar a conocer la decisión de la juez Biotti.
En tanto, desde Sanofi Pasteur, la división vacunas del Grupo Sanofi, informó que la Secretaría de Promoción de la Salud, Prevención y Control de Riesgos «solicitó la provisión de 400.000 dosis de vacunas tetravalentes contra la enfermedad meningocóccica (serogrupos A, C, Y y W)».
«La solicitud se hizo a través del Fondo Rotatorio de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para el cumplimiento del esquema de vacunación a los 11 años, que es obligatoria y gratuita», señalaron en un comunicado.
«Hemos respondido rápidamente al pedido de vacunas por parte de las autoridades sanitarias, para colaborar con el mantenimiento de la implementación del programa de vacunación. Las dosis ya están en el país», aseguró a esta agencia Juan Martín Meli, gerente general para Cono Sur.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Enfermedad Meningocócica Invasiva (EMI) es de difícil diagnóstico y puede causar la muerte en menos de 24 horas. La infección es de fácil contagio en contacto cercano con personas enfermas, sobre todo en lugares con hacinamiento o aglomeración, como bares, fiestas o clubes.
Asimismo, la EMI puede afectar a personas de todas las edades y las tasas de letalidad son muy altas, con riesgo de secuelas permanentes en sobrevivientes de entre el 10% y el 20%.
La importancia de la vacunación
Consultada sobre la importancia de la vacunación en adolescentes, la doctora Silvia González Ayala, profesora de enfermedades infecciosas de la Universidad Nacional de La Plata, explicó que «particularmente sobre el final de la adolescencia ese grupo es el que más presenta meningococo en su nariz y garganta, bacteria que se contagia por vía respiratoria a los más pequeños, que se enferman gravemente».
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