El silencio de la fiscalía devino en que el abogado del viudo Nicolás Cajal, imputado por el crimen, pida el resguardo del material genético hallado en el cuerpo y la casa de la víctima.
La investigación que busca esclarecer la violenta muerte de Jimena Salas, ocurrida el 27 de enero de 2017 en su casa en Vaqueros, sigue siendo una incógnita, sin embargo la detención de un vendedor ambulante y la imputación al viudo de la víctima reanimaron la hipótesis de un crimen por encargo, en ese contexto el abogado de Nicolás Cajal pidió el resguardo de las muestras de ADN.
Pedro Arancibia nunca pudo constituirse como querellante en la causa, es más, sólo el Estado investiga el caso, luego de que el viudo de la mujer sea acusado de encubrimiento agravado y deba tomar su defensa. Ningún familiar de Jimena tomó la posta en la justicia para pedir el esclarecimiento del caso, por el contrario mostraron su apoyo a Cajal, asegurando que es inocente, según publicó Informatesalta.
En ese contexto y luego de que la fiscalía pida el mantenimiento de la detención del único detenido por el caso, Sergio Vargas, asegurando que pericias en su celular arrojaron datos valiosos para la investigación, el abogado de Cajal denunció la posibilidad de una manipulación de las pruebas resguardadas en el CIF.Aseguró que hace dos meses solicitó a la justicia que se pongan a disposición los electroferogramas, gráficos que describen los perfiles genéticos de los ADN masculinos encontrados en la escena del crimen. “Información clave para que no se pretenda cambiar los ADN y acusar a un inocente”.
“Esta prueba viene siendo ocultada y denegada por el Ministerio Publico Fiscal a pesar de que el día 30 de julio 2019 el Juez de Garantía Héctor Martínez ordenó a la Fiscalía la inmediata entrega de los electroferogramas y marcadores de ADN que ya había solicitado dos oportunidades, sin embargo se sigue incumpliendo la orden judicial”, detalló en un comunicado.
Otro de los pedidos que realizó es la entrega de “las copias de actas de la cadena de custodia del cuerpo de Jimena Salas”, algo que si bien se reconoce como una documentación interna de la fiscalía, entienden es necesario para evitar irregularidades.Es que el abogado de Cajal sospecha que con el giro que dio la investigación intentarán culpar al viudo del violento crimen. “Esta negativa injustificada, reticencia u ocultamiento de prueba esencial hace sospechar que se estaría pretendiendo esconder o adulterar la prueba existente en la causa a los fines de introducir ilegítimamente alguna evidencia que hasta el momento no había sido incorporada sin el control de las partes”, sentenció.
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