Por Guillermo LoCane
Según un pormenorizado informe de AFIP presentado ante el juez Bonadío en el marco del caso Los Sauces, la ex presidente habría incurrido en evasión tributaria. Se estima que la ex mandataria habría tenido “ingresos omitidos” por $ 2,5 millones y que debería al fisco más de$ 700.000. Este monto evadido supera el mínimo que la ley penal tributaria requiere para una imputación penal.
Las desprolijidades, barrabasadas, errores conceptuales y torpes acciones para evadir los impuestos están a la orden del día en las DD.JJ. de la ex mandataria. Así lo revela el portal de noticias del diario La Nación en una nota de día de hoy.
Analizando solamente el año pasado (2016) surge que, la ex presidente presentó una declaración rectificativa y modificó buena parte de los números originalmente declarados. Insólitamente, cambió el monto del consumo declarado, lo que siempre dispara las alertas del organismo fiscalizador. El cambio principal fue el referido a los gastos: había informado un consumo de unos $ 70 millones, pero luego modificó la cifra y declaró $ 3,1 millones. Hubo, también, otras modificaciones entre la declaración jurada original y la rectificativa. Entre otras, cambió la cifra de su dinero en efectivo e incorporó un “crédito contra AFIP” por unos $ 2,5 millones. También reconoció rentas netas de primera categoría (alquileres) por unos $ 1,7 millones, que no había informado en un comienzo.
OMITIÓ PAGAR IMPUESTO A LAS GANANCIAS POR LAS PENSIONES DE NK: Analizando años anteriores, La AFIP detectó dos presuntas inconsistencias relevantes en los números de CFK.
#) Se detectó que, en 2010, 2011 y 2012 la ex mandataria declaró “exentas” las pensiones que percibió del Estado como viuda de NK. La ley indica claramente que ese rubro debe ser considerado una ganancia de cuarta categoría y tributar impuestos. Se estima que CFK debió haber pagado (y no pagó) unos $ 400.000 anuales en impuesto a las ganancias, mientras su propio gobierno, sin miramientos ni contemplaciones y con MNI y tablas de liquidación con números totalmente desactualizados, le cobraba injustamente ese mismo impuesto a millones de trabajadores y jubilados.
#) La otra gran inconsistencia, es que CFK no exteriorizó gastos no deducibles correspondientes al impuesto a las ganancias de 2015, que ascendieron a $ 2,5 millones. Para el organismo, eso se tradujo en “ingresos omitidos”. Es una presunción habitual que hace la AFIP cuando hay gastos no declarados y, por lo tanto, se especula con que se cubrieron con ingresos en negro.
IMPUESTOS OMITIDOS POR EL AÑO 2016 ALCANZAN A $769.000: En función de esa estimación, la AFIP proyectó que en lugar de tener Ganancias sujetas a impuesto por $ 6,6 millones por esos “ingresos omitidos” la ex presidenta habría tenido $ 9,1 millones. Esa discrepancia se traduciría en un saldo de impuesto a ingresar de $ 769.000 “superando el monto mínimo de punibilidad previsto por la ley penal tributaria”. Hay que recordar que esa norma estipula que las OMISIONES al fisco que superen el monto de $ 400.000 son pasibles de ser consideradas evasión simple. Dado que las omisiones detectadas superan ese rango, la cuestión sería materia de la ley penal tributaria, que incluye penas de prisión.
Fuente Perfil
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