Buscan establecer si se trata de la vecina que el sábado había sido arrastrada por la corriente. Hasta anoche quedaban unas 450 personas evacuadas por las inundaciones en diferentes localidades.
Bomberos voluntarios encontraron ayer un cadáver en la quebrada del paraje Arenas, en Salvador Mazza, a 10 kilómetros del puente internacional con Bolivia. Si bien se presume que podría ser el cuerpo de una mujer que había sido arrastrada por la corriente, hasta anoche no se había confirmado su identidad.
El sábado había comenzado un operativo de búsqueda, cuando una señora que intentaba cruzar el Alto Verde, en la localidad fronteriza de Salvador Mazza, cayó al agua.
Ayer al mediodía, personal de Bomberos Voluntarios halló el cuerpo de una mujer con signos de ahogamiento cerca de la frontera. El cadáver fue trasladado a la morgue de Tartagal, donde permanecía anoche.
Fuentes policiales informaron que la identificación de los restos resultaba compleja por el efecto del agua.
La mujer que era buscada estaba junto a una amiga y un hombre, todos adultos, el sábado a la mañana. Los tres estaban tratando de cruzar el río porque se dirigían a una fiesta en Bolivia.
De acuerdo a la versión de los testigos, primero pasó el hombre y luego una de las mujeres, pero la segunda se cayó en el lecho y se la llevó la correntada.
Evacuados y robos
Al cierre de esta edición quedaban unas 450 personas evacuadas de las más de 800 que habían tenido que dejar sus casas por las inundaciones en diferentes puntos de la provincia durante el fin de semana.
En Las Lajitas, la zona que resultó más afectada y donde 340 personas debieron alojarse en distintos centros, había 123 evacuados.
En Apolinario Saravia eran 92 los refugiados por las inundaciones. En Río del Valle, en tanto, eran 40 personas, en Luis Burela, 84 y en Rivadavia Banda Sur, 23. En Joaquín V. González todos habían regresado a sus viviendas.
Personal de Defensa Civil afectado a Las Lajitas recorría ayer parajes inhóspitos. «Hemos encontrado a personas resguardadas en los árboles», le dijo un rescatista a El Tribuno. El trabajo de las personas afectadas a ayudar a las víctimas fue intenso.
«Estamos retomando la tranquilidad y es por eso que desde ahora vamos a asistir a las familias a las que no habíamos podido llegar. Se trata de familias que no querían abandonar sus casas por temor a la fuerte ola de robos que hubo desde el viernes», dijo la secretaria de Acción Social de la Municipalidad, Emilce Quintana.
Personal de la Municipalidad se encontraba ayer trabajando para llegar a los parajes más lejanos, como el de Laguna Verde, en donde el río Del Valle continuaba provocando temor.»Mientras siga lloviendo en los cerros vamos a tener a vecinos afectados porque los ríos no se calman», agregó Quintana.
Sin embargo, lo que más preocupaba era el pronóstico que anunciaba posibles tormentas para toda la semana. Según Quintana, el drenaje natural está «colapsado».
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