Sin custodia policial, el delincuente agarró un caño y le partió la cabeza a la mujer.Ayer, cerca de las 18, un aparente descuido policial casi termina en tragedia dentro del hospital San Roque (Embarcación). Un preso fue dejado sin custodia y casi mata a fierrazos a una trabajadora de limpieza, según informó Que Pasa Salta.
El delincuente aprovechó que nadie lo cuidaba y se escondió en un baño. En su intento de fuga, se topó con la ordenanza y le partió la cabeza con un caño de hierro que encontró tirado.
La víctima comenzó a gritar y aparecieron los policías a reducir al sujeto, informó Radio Panamericana.
La ordenanza fue atendida en la guardia y está fuera de peligro, pero con un susto tremendo y su cabeza lastimada.
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