El simple método de la gurú fitness de 70 años para conservar su increíble aspecto físico

El paso del tiempo con sus consecuentes cambios físicos son el tormento de muchas personas, muy preocupadas por su aspecto. El hecho es inevitable, la fórmula contra el envejecimiento no existe. Pero puede ralentizarse y gozar de una figura más acorde con la pretensiones. Un ejemplo de ello es Carolyn Hartz, una gurú fitness de 70 años, a quien por su apariencia la suelen relacionar con una edad mucho menor, según informo Infobae.

Llevando una vida activa, esta mujer oriunda de Perth (Australia) adopta y fomenta un estilo wellness. Empresaria, madre de tres hijos y consejera nutricional, presume un cuerpo y tez asombrosos que muestra en las redes sociales, generando la envidia de otras mujeres. Precisamente en sus canales sociales comparte consejos sobre belleza, salud, fitness y bienestar. Y también, el método que explica su éxito.

Para Hartz, hacer mucho ejercicio y tener buena actitud son pilares para sostener el buen estado físico. Pero la alimentación es el factor esencial de su evolución. Hace 28 años tomó una decisión que -argumenta- resultó la clave para aún lucir una figura envidiable: abandonó el azúcar, un hábito que le costó al principio, ya que dice era amante de los dulces. En su lugar, utiliza un edulcorante llamado xilitol, proveniente de la madera de abedul.

Asegura que actualmente hornea sus propios dulces y postres usando nutritivos como la harina de almendra y coco, en lugar de la harina de trigo. Elige frutas y yogur natural, pero independientemente del alimento el punto importante es saber elegir las porciones correctas. «Comer de forma despreocupada puede llevarte a ganar peso innecesariamente», explica. Recomienda saborear y disfrutar cada bocado, para favorecer un consumo más lento, de modo de no pasarse

La rutina alimentaria incluye la ingesta de proteínas en cada comida, especialmente en el desayuno, para prevenir los antojos. En tanto en lo referido a la practica física, opta por el yoga como método de entrenamiento, una rutina que sigue tres veces a la semana. Además, duerme por lo menos ocho horas al día. Otros hábitos que suma son la meditación y una protección con esmero de la piel: «Nunca voy a la cama sin quitarme mi maquillaje e hidrato mi piel cada noche, especialmente alrededor de los ojos y el cuello. Llevo protector solar todos los días bajo mi maquillaje y nunca tomo sol», especifica.

Los resultados son alcanzables, una aspiración que podrían lograr las demás. «Muchas mujeres que han superado los 50 piensan que no es posible tener ni una buena línea ni un peso razonables. Sabemos que nuestro metabolismo se ralentiza a medida que envejecemos, y eso significa que tenemos que tomar el control y tomar decisiones más saludables y trabajar un poco más», afirma.