La Conmebol y la Federación Peruana dieron garantías para que el martes se enfrenten Perú y Argentina en Lima, pese a la crisis social que se desató en el país.
La renuncia del congresista Manuel Merino a la presidencia de Perú bajó la tensión social en Lima, capital de Perú. Esto fue un dato que alimentó la chance de que este martes, a las 21.00, se juegue el partido entre las selección de Ricardo Gareca y Argentina, programado por la cuarta fecha de las Eliminatorias. Es más: hubo contactos entre la dirigencia de la Conmebol y la Federación Peruana y se resolvió que hay garantías para que se juegue: todo se oficializará mediante un comunicado, informó Olé.
Igual, queda una preocupación: el Congreso de ese país debe elegir un nuevo jefe de Estado y la reacción que se produzca será determinante para confirmar el encuentro. Según le informaron a Olé desde ese país, en caso de que el elegido sea alguien vinculado ideológicamente a Merino, puede desatarse un nuevo conflicto, lo cual puede complicar el desarrollo del deporte.
El conflicto surgió luego del juicio político y la destitución del presidente Martín Vizcarra por «incapacidad moral», tras ser acusado por otros investigados de recibir una coima en el 2014 cuando era gobernador de la región Moquegua, la gente salió a las calles para manifestarse en contra de la designación de Merino, quien este domingo dejó su cargo por las presiones sociales.
Después de días de marchas en distintos puntos del país, en las últimas horas se vivió una violenta represión en las inmediaciones del Congreso en Lima, que dejó un saldo de al menos dos muertos y 94 heridos. La seguridad social informó la noche del sábado que dos hombres fallecieron por heridas de armas de fuego en la capital peruana. El Ministerio de Salud añadió que otros 94 resultaron heridos, muchos de ellos por politraumatismos, inhalación de gases lacrimógenos o heridas de proyectil.
En este marco, en la previa del viaje de la Selección Argentina a Perú, el partido había quedado en duda por la difícil coyuntura política y social del país. Hasta que llegó el acuerdo de la Conmebol con la Federación.
Tras los hechos de violencia, el presidente del Congreso, Luis Valdez, pidió la renuncia de Merino, que luego se hizo efectiva. Además, aseguró que se reunirán este domingo para elegir un nuevo presidente del Congreso que lo reemplace a él en el cargo. Nueve ministros de Merino también renunciaron tras las muertes, entre ellos los secretarios de Defensa, Educación, Salud, Mujer, Comercio Exterior, Agricultura, Cultura, Vivienda y Energía.
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