Reclamos salariales Colonia Santa Rosa: Los empleados tomaron la comuna

En Colonia Santa Rosa los municipales amenazan con salir a cortar la ruta 34

Ayer fue un día de mucha agitación en la Municipalidad de Colonia Santa Rosa donde los empleados tomaron la sede comunal y anticiparon que no se moverán hasta obtener la respuesta a sus reclamos salariales que vienen sin ser escuchados desde hace tiempo.

Ayer los empleados entraron en paro y posteriormente desde los sectores sindicales se congregaron en la sede de la comuna. Al frente de la misma colocaron gomas y poco tiempo después ingresaron a las dependencias, donde permanecían hasta anoche.

Para hoy se anuncia una asamblea de trabajadores y algunos representantes sindicales anticiparon que saldrán con la protesta a la ruta 34 y no descartan llevar a cabo allí una medida de fuerza.

«No puede ser que a la mayoría de los municipios les dieron a principios de año un aumento del 30% y ese aumento no llegó aquí», reclamó Rosa Isasmendi. La dirigente gremial manifestó que «nos vamos a quedar aquí hasta que este problema se solucione de una vez».

Los reclamos salariales de los trabajadores de Colonia Santa Rosa vienen desde principios de año y nunca tuvieron respuesta. En mayo, y ya con las restricciones de la pandemia, los empleados tomaron la comuna con la promesa de una pronta solución, pero «hasta el momento nada de eso se ha cumplido», afirmaron

«Aquí no hay trabajo y sin plata la gente está muy nerviosa. Además, no hay movimiento comercial. No está funcionando el transporte y con las restricciones de la pandemia todo está paralizado. La gente viene desde hace años con muchos reclamos que nunca fueron escuchados y ahora con todo esto se pone peor», dijo un vecino.

A fines de mayo, y luego de varios intentos frustrados por conseguir alguna respuesta, los trabajadores de la Municipalidad de Colonia decidieron tomar las instalaciones de la sede comunal. La medida se adoptó también como consecuencia de la falta de respuesta a sus pedidos salariales.

Los trabajadores habían reclamado al intendente Mario Guerra un incremento del 30% de sus ingresos desde antes del inicio de la cuarentena y a pesar de varios intentos no lograron llegar a un acuerdo.

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