La querella denuncia que aún no se determinó el móvil del asesinato de la docente, atacado en la playa de estacionamiento de un supermercado y ultimada en las márgenes del río Arenales.
A nueve meses del crimen de Sandra Palomo, la querella denuncia la falta de avances en una causa con permanentes cambios de fiscales y dónde aún no se determinó el móvil del asesinato de la docente.
«Pasó mucho tiempo, algunos accidentes en la investigación como el cambio de fiscales. Primero estuvo la doctora Luján Sodero Calvet, luego el doctor Torres Rubelt quien se inhibió, luego continuó el caso la doctora Odorissio y ahora volvió irónicamente a Torres Rubelt», aseguró el abogado querellante, Pablo del Pino, en diálogo con Central Policial por Profesinal FM.
El abogado explicó que Torres Rubelt se había desvinculado de la causa porque tenía relación con uno de los imputados pero por disposición de la Procuración general de la Provincia volvió a estar a cargo del caso.
El abogado patrocinante señaló además del tiempo perdido la misteriosa desaparición de una cámara que sería clave para el caso, cuando Palomo fue abordada y atacada en la playa de estacionamiento de un supermercado de barrio Tres Cerritos mientras subía a su camioneta. «Hay mucho trayecto recopilado con las cámaras de seguridad, pero justo la cámara que estaría filmando el momento del ataque desapareció del supermercado», dijo y reclamó: «la fiscalía no buscó esclarecer el móvil del crimen».
La jueza de Garantías 1 en feria, Claudia Puertas, rechazó el cambio de calificación legal y el pedido de reveer la prisión preventiva para Ricardo Nahuel Bonifcacio, uno de los menores detenidos en la causa que investiga el crimen de la docente Sandra Palomo.
Bonifacio está acusado provisariamente por el delito de homicidio calificado por ensañamiento y alevosía junto a Ian Esteban Caro y tres menores de edad.
La jueza también rechazó en su resolución la revisión de la prisión preventiva para Bonifacio e hizo lugar a la prórroga de la Investigación Penal Preparatoria solicitada por la fiscalía actuante por el término de cuatro meses a contarse desde la fecha de la resolución, para lo cual tuvo en cuenta que el hecho requiere una investigación sumamente compleja. Puertas sostuvo que ante la voluminosidad del Legajo, se advierte una intervención sumamente activa por parte del órgano acusador, lo que justifica que se otorgue la prórroga solicitada.
La jueza dijo que no puede afirmarse que haya quedado demostrado, de la sola incorporación de elementos objetivos sin valor probatorio, que el acusado haya realizado una conducta más compatible, a su entender, con el delito de encubrimiento que con el de homicidio. Ello podría ser parte de la teoría del caso de la defensa técnica, y eventualmente formularlo al momento del juicio, en caso que la fiscalía incrimine a su defendido en la oportunidad procesal correspondiente.
En cuanto a la revisión de la prisión preventiva planteada la jueza indicó que continúan vigentes todos los argumentos que fundamentaron la imposición de la medida cautelar máxima contra el imputado el 2 de octubre pasado.
Sandra Palomo desapareció el 31 de agosto de 2019 y un día después fue encontrada muerta en las márgenes del Río Arenales con severas heridas. La autopsia confirmó que la víctima agonizó durante varios minutos mientras los agresores regresaron a la Capital en su camioneta Toyota Hilux.
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