El Centro de Formación Política “Juan Domingo Perón” afirma que «Salta continuará retrasando su ingreso en el siglo XXI si no somos capaces de reformar la política y las instituciones de gobierno, de legislación y de justicia».
Así se manifestaron los dirigentes políticos, Julio Argentino San Millán y Antonio Lovaglio.
A través de un documento que titularon «Consenso para Reconstruir las Instituciones Salteñas», analizan la actual situación política y expresan sus puntos de vista respecto a la institucionalidad.
Observaron que «la pobreza, el raquitismo de nuestro aparato productivo, nuestra irrelevancia en el escenario global y nacional, la concentración del poder, las notorias carencias que soportamos en materia de educación, salud, justicia, ambiente, urbanismo e infraestructuras, permanecerán mientras no nos decidamos colectivamente a regenerar la política y a reformar instituciones que han devenido obsoletas».
Recordaron que estos fueron los fundamentos por los que, hace tres años, llevaron al Centro de Estudios y Formación Política Juan D. Perón -apoyar a dirigentes políticos y a ciudadanos independientes de casi todas las expresiones políticas salteñas-, a impulsar el documento Consenso de cambios para el progreso de Salta.
«En aquel momento, y pese a la expresa invitación que hicimos los firmantes, de la referida propuesta, el Gobierno provincial ignoró la convocatoria y desdeñó la nueva agenda que surgía fruto de la autonomía cívica», señalaron.
Advirtieron respecto de las instancias de dialogo a las que está convocando Urtubey afirmando que el proceso que parece estar abriéndose merece dos observaciones importantes.
«La primera tiene que ver con la pretensión del Gobierno provincial de mantener, sin las garantías democráticas imprescindibles, el régimen de votación con boleta electrónica”, observaron.
«Si de verdad el oficialismo, tras de más de diez años de ejercer el poder, se propone impulsar soluciones republicanas, debe comenzar por aceptar los reclamos que diversos sectores políticos y técnicos altamente cualificados venimos formulando respecto de las reglas del voto electrónico en su versión salteña», agregaron.
Para San Millán y Lovaglio, «no sirve a la sociedad de los salteños que el Gobierno, amparándose en el Tribunal Electoral, se empecine en negar el acceso al código fuente, en impedir el control sobre la privatizada transmisión de los datos del escrutinio, o en eliminar el recuento manual, entre otros aspectos que expresáramos en los documentos que hiciéramos llegar al Poder Ejecutivo provincial y ambas cámaras legislativas».
Sobre la segunda de las observaciones que plantean, explicaron que apunta a remarcar la necesidad de abrir un verdadero diálogo político que convoque a todas las fuerzas que expresan ideas o proyectos diferenciados.
«Tampoco sirve a la sociedad de los salteños que el gobernador dialogue con sus adeptos e incondicionales, o pierda horas buscando diluir los intrascendentes matices que separan las iniciativas de diputados o ministros enrolados en el oficialismo», acotaron.
Consideraron que «el verdadero diálogo político en condiciones de arribar a un consenso para el cambio es aquel en el que participen las organizaciones y personalidades a través de las cuales se expresa hoy (en un contexto de decadencia o parálisis del sistema de partidos políticos) el pluralismo de los salteños».
Finalmente, Julio Argentino San Millán y Antonio Lovaglio Saravia dijeron que «nuestro Centro reitera su plena disposición a participar con vocación constructiva en un diálogo que reúna estas condiciones, y que se produzca una vez que el Gobierno haya dado muestras de su decisión de terminar con las rutinas que debilitan la república y empobrecen la democracia provincial».
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