Este albañil, de 26 años, había hecho un pequeño hueco en la habitación de su hijastra adolescente, a quien espiaba y filmaba con su teléfono celular cada vez que se cambiaba de ropa. La menor lo descubrió y lo hizo detener.
Aunque se desconoce aún desde que fecha el sujeto realizaba esta práctica, se especula que en el teléfono habría imágenes de, al menos, más de un mes de la adolescente de 15 años, quien el martes pasado, en horas de la tarde, recién descubrió lo que sucedía, según informó Informatesalta.
El escenario fue una vivienda del barrio Libertad, en la zona sudeste de la ciudad, donde reside la menor junto a su madre y el acusado, quien es su padrastro. El martes a la tarde, cuando la menor se hallaba semidesnuda, cambiándose de prendas de vestir, es que prestó atención a un pequeño hueco en la pared, el cual da a un baño colindante.
Al acercarse y echar una mirada por el agujero, pudo descubrir que del otro lado alguien filmaba con un teléfono celular, por lo que se dirigió al baño, cuya puerta está por el exterior. Al abrir, se dio nada menos que con su padrastro, quien sostenía en sus manos el aparato móvil.
Descubierto, el sujeto guardó de inmediato el teléfono a la vez que la menor comenzó a exigirle respuesta a su accionar, pero el padrastro se quedó mudo, por lo que la joven, en estado de crisis, salió de la casa y se dirigió a la vivienda de una vecina, a quien le pidió que llamara a su madre.
Pese a los intentos por comunicarse con la progenitora, la vecina terminó por trasladar a la menor hasta la casa de una tía de la adolescente, quien ante el relato de la víctima llamó de inmediato al 911, y a los pocos minutos una patrulla policial se hizo presente.
Los uniformados, al ser interiorizados de lo ocurrido, detuvieron al albañil, quien en todo momento negó la acusación de la adolescente. Ahora, la fiscalía penal de Delitos contra Integridad Sexual trabaja en busca de establecer desde qué momento el sujeto espiaba y filmaba a su hijastra.
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