Pandemia Alarma en los Pumas por un brote masivo de coronavirus

Parece que el 2020 no es un buen año para el rugby argentino. Luego de un comienzo con una gran expectativa de cara al Súper Rugby, la temporada debió suspenderse por la pandemia y la franquicia de Jaguares se quedó sin competencia y al borde de la extinción. A esto se le sumó la derrota de Agustín Pichot por la presidencia de la World Rugby. Y cuando todo parecía remontar con el regreso de Los Pumas y la confirmación, a priori, del Rugby Championship, un brote masivo de coronavirus en el plantel atenta contra la preparación del equipo.

Es que, después de que el head coach Mario Ledesma confirmara la preselección de 59 jugadores que se comenzaron a entrenar desde sus casas por la cuarentena oblitagatoria, la Unión Argentino de Rugby había conseguido que se aprobara el protocolo para que los representantes del equipo nacional vuelvan a los entrenamientos presenciales y grupales en su predio de Escobar.

Allí, comenzaron a moverse a fines de agosto, pero las primeras malas noticias no tardaron en llegar: Tomás Lezana, Santiago Chocobares, Santiago Carreras, José Luis González y Federico Wegrzyn dieron positivo en los testeos previos y debieron ser separados para cumplir con los 14 días de aislamiento.

Fue así que, desde el cuerpo técnico, decidieron formar una burbuja sanitaria para preservar la salud de sus jugadores y continuar con la preparación de cara al torneo que agrupa a los cuatro seleccionados más importantes del hemisferio sur. Sin embargo, el día antes del comienzo de la misma seis nuevos jugadores dieron positivo: estos fueron Emiliano Boffelli, Juan Cruz Mallía, Bautista Delguy, Bautista Pedemonte, Lucas Bur y Rodrigo Fernández Criado. Por lo que, sumado a los anteriores afectados por el covid-19 y a Javier Ortega Desio, quien jamás consiguió entrenarse debido a que se había infectado antes de la vuelta de las prácticas, los Pumas sumaron doce bajas y dos miembros del staff.

Al cabo de poco más de una semana concentrados, donde los jugadores se entrenaban en Casa Pumas y luego dormían en un hotel cercano de la zona, parece que dentro de la burbuja se produjo un brote masivo, según arrojaron los últimos estudios del miércoles. Esto llevó a que la dirigencia tome la decisión de romper con esta medida y mandar a todos los integrantes de la concentración a sus hogares.

“Ayer aparecieron más casos y nos mandaron a nuestras casas. Por suerte la mayoría somos asintomáticos. El lunes nos vuelven a testear a todos, así que estamos esperando eso”, confirmó uno de los jugadores que dio positivo.

De esta manera, la actividad del grupo quedó suspendida hasta la semana que viene. Este jueves los cinco primeros contagiados ya habían recibido el alta para reincorporarse pero deberán aguardar a ver qué sucede con el resto de sus compañeros.

Todo esto ocurre bajo un marco de incertidumbre ya que el Rugby Championship dio un paso para atrás y aún no es oficial su disputa. Todo indicaba que el torneo se iba a jugar en Nueva Zelanda, pero desde el gobierno parece que no autorizaron la llegada de equipos extranjeros. Las últimas noticias señalan que ahora está la posibilidad que el mismo se lleve a cabo en Australia, pero sin ningún tipo de certeza.